Aluminio,fosfato
Indicaciones
– Dispepsia: hiperacidez, indigestion, pirosis, acidez de estómago.
– Protección de la mucosa gástrica y esofágica.
– Tratamiento alternativo a otras sales de aluminio en pacientes con dieta pobre en fosfatos.
Posología
La cantidad e intervalos de dosis depende del tipo de alteración y de la severidad y frecuencia del dolor. Como pauta usual se recomienda la siguiente:
Oral. Adultos: 1-2 sobres, media hora después de las comidas, o cuando aprezcan las molestias.
Normas para la correcta administración: El gel puede tomarse puro o diluido en medio vaso de agua, con o sin azúcar. En las afecciones esofágicas se recomienda la toma del gel puro, después de las comidas.
Precauciones
Precauciones: pacientes con insuficiencia renal.
Interacciones
– Antiinflamatorios no esteroídicos (ácido flufenámico o mefenámico, indometacina): hay estudios con algunos antiácidos (algeldrato, óxido magnesio, carbonato calcio) en los que se ha registrado disminución en su absorción.
– Betabloqueantes (propranolol, atenolol): hay estudios con algunos antiácidos (algeldrato, hidróxido magnesio) en los que se ha registrado disminución de la absorción debido a un descenso de la disolución del betabloqueante, por lo que se recomienda espaciar su administración.
– Digitálicos (digoxina, digitoxina): hay estudios con algunos antiácidos (algeldrato, hidróxido magnésico) en los que se ha registrado disminución en la absorción del digitálico, por lo que se recomienda espaciar su administración 2 ó 3 horas.
– Procainamida: hay estudios en los que se ha registrado posible disminución en su absorción.
– Quinolonas (ciprofloxacino, norfloxacino): hay estudios con algunos antiácidos (algeldrato, almagato) en los que se ha registrado disminución de su absorción por formación de complejos insolubles no absorbibles a nivel intestinal, por lo que se recomienda separar su administración 2 ó 3 horas.
– Ranitidina: hay estudios en los que se ha registrado una posible disminución en sus niveles séricos, debido a una disminución de su absorción.
– Sales de hierro (citrato, fumarato, sulfato de hierro): hay estudios con algunos antiácidos (algeldrato, trisilicato magnesio) en los que se ha registrado disminución en la absorción por formación de complejos poco solubles, por lo que se recomienda espaciar la administración 2 ó 3 horas.
– Salicilatos (ácido acetilsalicílico): hay estudios con algunos antiácidos (almagato, trisilicato aluminio) en los que se ha registrado disminución de los niveles de salicilatos, por una mayor excreción debido a la alcalinización de la orina.
– Tetraciclinas (doxiciclina): hay estudios en los que se ha registrado posible formación de complejos no absorbibles a nivel gastrointestinal, disminuyendo así su absorción, por lo que se recomienda espaciar la administración 2 ó 3 horas.
Embarazo
Categoría B de la FDA. Algunos estudios preliminares con hidróxidos de aluminio, magnesio y calcio habían observado un posible aumento (al doble) de la incidencia de diversos tipos de anomalías congénitas en niños, no obstante, estudios posteriores no han confirmado estas observaciones. Asimismo, se han descrito casos aislados de aumento de reflejos tendinosos en los fetos y recién nacidos. Se recomienda evitar un consumo excesivo y durante periodos de tiempo prolongados.
Lactancia
Con el uso de antiácidos en general, se pueden excretar pequeñas cantidades de magnesio y aluminio con la leche materna, las cuales no parecen ser suficientes para provocar efectos adversos en el recién nacido. Uso aceptado, recomendándose evitar un uso crónico y/o excesivo.
Niños
No se recomienda el uso incontrolado de antiácidos en niños menores de 6 años ya que podrían enmascarar síntomas graves (apendicitis, etc.).
Ancianos
El empleo prolongado de antiácidos alumínicos en ancianos puede conducir a la absorción sistémica de aluminio, produciendo acumulación orgánica, lo que podría agravar la osteoporosis presente en casi todos los ancianos debido a la depleción de fósforo y calcio, y a la inhibición de la absorción digestiva de fluoruros. No se recomienda el uso crónico y/o excesivo, muy especialmente en pacientes con enfermedad de Alzheimer, ya que se ha sugerido un potencial papel etiológico del aluminio en esta enfermedad.
Reacciones adversas
Los efectos adversos de fosfato de aluminio son, en general, leves y transitorios. Las reacciones adversas más características son:
-Ocasionalmente (1-9%): estreñimiento.