Metacualona
Acción y mecanismo
La Metacualona es un derivado de la
quinazolina con actividad hipnótica y sedante.
Indicaciones
Autorizadas en España: Insomnio.
Posología
Oral. Adultos: 125-250 mg/24 h, al acostarse. Deben
evitarse los tratamientos superiores a dos o tres semanas,
sugiriéndose el uso intermitente del fármaco durante este
período. En períodos de uso superiores a una semana, se aconseja
que la supresión del tratamiento sea gradual, a fin de minimizar
el riesgo de insomnio de rebote.
Contraindicaciones
Contraindicado en alergia a
metacualona, así como en estados depresivos, historial de
drogodependencia, insuficiencia hepática grave, embarazo,
lactancia y niños.
Precauciones
Precauciones: No se aconseja la conducción de vehículos, ni el
manejo de maquinaria peligrosa o de precisión durante los
primeros días de tratamiento. Deberá evitarse el consumo de
bebidas alcohólicas durante el tratamiento.
Advertencias/consejos
Con el uso prolongado se desarrolla
dependencia y tolerancia. La interrupción brusca de un
tratamiento prolongado puede precipitar un síndrome de
abstinencia (debilidad, ansiedad, cefalea, mareos, irritabilidad,
temblor, náuseas, vómitos, insomnio). Por ello, la interrupción
se hará gradualmente, durante dias o semanas.
Interacciones
Se potencia el efecto de la
metacualona por difenhidramina. Se potencia la toxicidad de la
metacualona por propranolol.
La metacualona puede alterar los valores de las siguientes
determinaciones analíticas:
-Sangre: aumento (interferencia analítica) de paracetamol.
-Orina: aumento (interferencia analítica) de cetosteroides
(17-ceto/17-cetogénico).
Reacciones adversas
Los efectos adversos de metacualona son, en
general, frecuentes y moderadamente importantes. En la mayor
parte de los casos, las reacciones adversas son una prolongación
de la acción farmacológica y afectan principalmente al sistema
nervioso central. Las reacciones adversas más características
son:
-Frecuentemente (10-25%): sedación, somnolencia y ataxia.
-Ocasionalmente (1-9%): mareos, alteraciones del humor,
alteraciones cognitivas, depresión; excitación paradójica en
niños o en ancianos, con ansiedad y agresividad; nistagmo,
erupciones exantemáticas y maculopapulares, náuseas, vómitos,
cefalea, fiebre.
-Raramente (<1%): fotodermatitis, angioedema, depresión
respiratoria, apnea, dermatitis exfoliativa, eritema multiforme,
síndrome de Stevens-Johnson, necrolisis epidérmica tóxica,
hepatitis; en tratamientos prolongados: anemia megaloblástica
(responde al ácido fólico) u osteomalacia.
-Excepcionalmente (<<1%): con dosis muy altas: miosis y disfasia.
El tratamiento debe ser suspendido inmediatamente en el caso de
que el paciente experimente algún episodio de hipersensibilidad
(erupciones exantemáticas o dermatitis).