Perfenazina
Acción y mecanismo
Antipsicótico fenotiazínico. Antidopaminérgico, estimula la producción de prolactina. Presenta actividad antiemética, anticolinérgica, sedante y bloqueante alfa-adrenérgica.
Indicaciones
– [ANSIEDAD].
– [ESQUIZOFRENIA].
– [PSICOSIS], paranoia.
– [DELIRIO].
– [MANIA].
Posología
Oral. Adultos: 4 mg/8 h, pudiendo incrementarse la dosis diaria, en función de la respuesta clínica, hasta un máximo de 8 mg/8 h (24 mg/día). Una vez controlados los síntomas agudos, es deseable reducir la dosis hasta un nivel mínimo efectivo como mantenimiento. En tratamientos crónicos se aconseja administrar
la mayor parte de la dosis a la hora de acostarse, así como ingerir las formas orales conjuntamente con las comidas.
Contraindicaciones
– Alergia a perfenazina o [ALERGIA A FENOTIAZINAS].
– Puede exacerbar la enfermedad en pacientes con [DEPRESION SISTEMA NERVIOSO CENTRAL], [DEPRESION MEDULAR], estados de [COMA] o [FEOCROMOCITOMA] (riesgo de reacciones de hipertensión).
Precauciones
– Alteraciones cardiovasculares graves ([INSUFICIENCIA CARDIACA] y/o [INSUFICIENCIA CORONARIA]): debido a las modificaciones hemodinámicas que pueden producir, en particular hipotensión por bloqueo alfa adrenérgico.
– [DIABETES]: puede alterar los niveles de glucosa en sangre.
– Enfermedades respiratorias ([ASMA] crónico, [ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRONICA]): puede tener efectos depresores sobre la función respiratoria.
– [EPILEPSIA]: los neurolépticos pueden disminuir el umbral convulsivo, con riesgo de crisis convulsivas, especialmente en pacientes de alto riesgo.
– [DEPRESION]: debido su efecto depresor sobre el sistema nervioso central.
– [GLAUCOMA EN ANGULO ESTRECHO], [HIPERTROFIA PROSTATICA] o [RETENCION URINARIA]: puede aumentar la presión intraocular y/o retención urinaria debido a los efectos anticolinérgicos, lo que podría agravar la enfermedad.
– [INSUFICIENCIA HEPATICA]: se metaboliza mayoritariamente en el hígado, por lo que se aconseja un ajuste de la posología al grado de funcionalismo hepático.
– [INSUFICIENCIA RENAL]: se elimina mayoritariamente por vía renal, por lo que se aconseja un ajuste de la posología al grado de funcionalismo renal.
– [PARKINSONISMO]: puede potenciar los efectos extrapiramidales, pudiendo agravar la enfermedad.
– Exposición a temperaturas extremas (calor o frío intenso): las fenotiazinas pueden producir un golpe de calor o hipotermia debido a la supresión de la regulación hipotalámica de la temperatura central y periférica inducida por la fenotiazina.
– [REACCIONES DE FOTOSENSIBILIDAD]: no es recomendable una exposición prolongada al sol ante el riesgo de que puedan producirse manifestaciones de fotosensibilidad.
– [SINDROME NEUROLEPTICO MALIGNO] (SMN): la administración de antipsicóticos se ha asociado a SMN, complejo sintomático potencialmente mortal (que cursa con hipertermia, rigidez muscular, alteración de la conciencia, pulso errático, diaforesis, taquicardia, etc.). Ante estos síntomas o en caso de fiebre inexplicable, se deberá suspender la administración e cualquier antipsicótico.
– [SINDROME DE REYE]: aumenta el riesgo de hepatotoxicidad en niños y adolescentes con signos y síntomas que sugieren el síndrome de Reye.
– [TORSADE DE POINTES]: los antipsicóticos pueden producir una prolongación del intervalo QTc, pudiendo conducir a la aparición de torsade de pointes. Se deberá guardar precaución, especialmente cuando coexista [BRADICARDIA], [DESEQUILIBRIO ELECTROLITICO], administración conjunta de fármacos capaces de prolongar el intervalo QTc o prolongación congénita.
– Actividades especiales: no se aconseja la conducción de vehículos ni el manejo de maquinaria peligrosa o de precisión durante el tratamiento, por posible aparición de somnolencia, mareos, etc. Evitar el consumo de bebidas alcohólicas.
Advertencias/consejos
Evitar la exposición prolongada al sol,
o utilizar protectores solares. Utilizar con precaución en climas
calurosos, pues aumenta la susceptibilidad a la hipertermia.
Comunicar al médico si aparece fiebre, dolor de garganta,
erupciones, temblores, ictericia o alteración de la visión. Se
aconseja la suspensión gradual de tratamientos prolongados, para
evitar el riesgo de síndrome de retirada o la rápida recaída en
la enfermedad. Durante tratamientos crónicos deben realizarse
recuentos sanguíneos y revisiones oftálmicas periódicas.
Interacciones
– Alcohol etílico: hay estudios en los que se ha registrado potenciación de la toxicidad, con aparición de reacciones extrapiramidales.
– Antidiabéticos: hay algún estudio en el que se ha registrado efecto hiperglucemiante de fenotiazinas, lo que podría inhibir el efecto de los antidiabéticos.
– Antidepresivos tricíclicos (amitriptilina, nortriptilina): hay estudios en los que se ha registrado aumento de los niveles plasmáticos de antidepresivo, con posible potenciación de su toxicidad, por inhibición del metabolismo enzimático.
– Diazóxido: hay un estudio con clorpromazina en el que se ha registrado potenciación de la toxicidad, con precoma diabético, por adición de sus efectos hiperglucemiantes.
– Disulfiramo: hay algún estudio en el que se ha registrado disminución de los niveles plasmáticos de perfenazina, con posible inhibición de su efecto, por posible inducción de su metabolismo hepático.
– Fluoxetina: hay algún estudio en el que se ha registrado potenciación de la toxicidad, con reacciones extrapiramidales.
– Hipokalemiantes (agonistas beta-adrenérgicos, anfotericina B, corticoides, diuréticos no ahorradores de potasio, laxantes). La hipopotasemia podría incrementar el riesgo de prolongación del intervalo QT y la aparición de arritmias cardiacas ventriculares graves como la torsade de pointes. Se aconseja extremar las precauciones en estos pacientes, controlando la kalemia y corrigiéndola en caso de hipopotasemia.
– Levodopa: hay estudios con clorpromazina en los que se ha registrado aumento de la toxicidad e inhibición mutua de sus efectos, por antagonismo a nivel dopaminérgico.
– Paroxetina: hay algún estudio en el que se ha registrado aumento de los niveles plasmáticos de perfenazina, con riesgo de toxicidad, por posible inhibición de su metabolismo hepático.
– Prolongadores del intervalo QT (adenosina, antagonistas 5-HT3, antiarrítmicos de clase Ia y III, antidepresivos a altas dosis, ciertos antihistamínicos H1, antipalúdicos, trióxido de arsénico, formoterol, contrastes de gadolinio, ivabradina, levacetilmetadol, levosimendan, macrólidos, pentamidina, algunas fluoroquinolonas, dasatinib, sunitinib, suxametonio, tacrolimús, vardenafilo). La administración conjunta de antipsicóticos aumenta el riesgo de aparición de arritmias cardíacas graves, tipo torsade de pointes, potencialmente fatales. Se recomienda evitar la asociación, y si fuera inevitable, monitorizar estrechamente la funcionalidad cardiaca.
– Sales de litio (carbonato de litio): hay algún estudio en el que se han registrado episodios de sonambulismo, tras su administración conjunta.
La perfenazina puede alterar los valores de las siguientes determinaciones analíticas:
– Sangre: aumento (biológico) de prolactina.
Embarazo
La perfenazina atraviesa la placenta. No hay estudios adecuados y bien controlados en humanos. Aunque existen divergencias, la mayoría de estudios consideran el uso ocasional y a bajas dosis de fenotiazinas seguro para la madre y el feto. Se han descrito casos aislados de ictericia prolongada, hipo o hiperreflexia y efectos extrapiramidales en neonatos con el uso de fenotiazinas cerca del final del embarazo. La perfenazina se ha utilizado como anitemético durante el parto sin producir efectos observables en el recién nacido. El uso de este medicamento, en especial durante el 1er trimestre (semanas 6-10), sólo se acepta en caso de ausencia de alternativas terapéuticas más seguras. En los casos extremos en que la embarazada deba ser tratada, algunos clínicos recomiendan el uso de agentes de alta potencia. Se deberá utilizar la menor dosis eficaz durante menor periodo posible, descontinuando el tratamiento al menos 5-10 días antes del parto.
Lactancia
La perfenazina se excreta con la leche materna. Solo existe un caso documentado de uso de perfenazina en madres lactantes; la proporción leche/plasma fue aproximadamente de 1 y no se registraron efectos adversos en el recién nacido. La Academia Americana de Pediatría considera el efecto de perfenzina sobre el neonato desconocido, pero potencialmente importante (p. ej, somnolencia, letargia, distonías y disquinesia tardía). Uso no recomendado en madres lactantes.
Niños
La seguridad y eficacia no se han establecido en menores de 12 años. Los pacientes pediátricos pueden ser más propensos a desarrollar reacciones neuromusculares o extrapiramidales, especialmente distonías, siendo especialmente proclives los niños con enfermedades agudas, como varicela, infecciones del SNC, sarampión, gastroenteritis o deshidratación. A causa de que los síntomas extrapiramidales pueden confundirse con los signos sobre el SNC de una enfermedad primaria no diagnosticada responsable del vómito (p. ej, síndrome de Reye) y otras encefalopatías, evitar el uso de antipsicóticos y otras hepatotoxinas en niños y adolescentes cuyos signos y síntomas sugieran la existencia de síndrome de Reye. Uso no recomendado en menores de 12 años.
Ancianos
Los pacientes geriátricos parecen presentar una mayor predisposición a sufrir hipotensión ortostática y una mayor sensibilidad a los efectos anticolinérgicos y sedantes. También tienen más tendencia a padecer efectos secundarios extrapiramidales, como disquinesia tardía (con signos persistentes, difíciles de controlar y en algunos pacientes irreversibles). Se recomienda observación durante el tratamiento para detectar signos precoces de disquinesia tardía y la reducción o interrupción del tratamiento para evitar una manifestación más grave del síntoma. Asimismo, se aconseja control de la función cardíaca. Los ancianos pueden presentar mayores concentraciones plasmáticas de fenotiazinas, por lo tanto, estos pacientes suelen necesitar una dosis inicial menor y un ajuste más gradual de la dosis. Uso precautorio, recomendándose especial control clínico.
Reacciones adversas
Los efectos adversos de perfenazina son, en general, frecuentes, aunque moderadamente importantes. En la
mayor parte de los casos, los efectos adversos son una prolongación de la acción farmacológica y afectan principalmente al sistema nervioso central. Las reacciones adversas más
características son:
-Frecuentemente (10-25%): [SOMNOLENCIA], [SEDACION], [SEQUEDAD DE BOCA], [VISION BORROSA], [RETENCION URINARIA] y [ESTREÑIMIENTO]; al inicio del tratamiento: síntomas extrapiramidales como [PARKINSONISMO], [ACATISIA] y [DISTONIA] que están relacionados con la
dosis.
-Ocasionalmente (1-9%): ictericia colestática a veces con [EOSINOFILIA] (durante el primer mes de tratamiento), [LEUCOPENIA] transitoria, [REACCIONES DE FOTOSENSIBILIDAD], [URTICARIA], [ACNE], erupciones maculopapulares, [PRURITO], [ANGIOEDEMA], [INSOMNIO], mareos e [ILEO PARALITICO].
-Raramente (<1%): [HIPOTENSION ORTOSTATICA], [HIPERTENSION ARTERIAL], [TAQUICARDIA] (principalmente al aumentar la dosis rapidamente), [BRADICARDIA], [INSUFICIENCIA CARDIACA], [ARRITMIA CARDIACA], [SINCOPE], [AGRANULOCITOSIS] (entre la cuarta y décima semana de tratamiento), diskinesia tardía (después de meses o años de tratamiento), [SINDROME NEUROLEPTICO MALIGNO] (puede ser mortal en el 15-20% de los casos) con síntomas como [FIEBRE], [RIGIDEZ MUSCULAR] generalizada, akinesia, hipertonía faringea y alteraciones respiratorias; [GALACTORREA], [AMENORREA],[RETINOPATIA] pigmentaria y convulsiones.
El tratamiento debe ser suspendido inmediatamente en el caso de que el paciente experimente algún episodio de fiebre (41ºC) ó rigidez muscular grave, con alteraciones respiratorias.