La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, ha destacado la propuesta de la Comisión Europea para 2012 de prohibir fumar en todos los establecimientos de hostelería, en el marco de la presentación este martes de la Estrategia en enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) del Sistema Nacional de Salud.

Según indicó la ministra, los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) muestran que en 2007 alrededor de 210 millones de personas padecían EPOC en el mundo, y en 2005 murieron tres millones de personas, un cinco por ciento de las muertes registradas. Además, se estima que para 2020 será la cuarta causa de muerte en todo el mundo.

En cuanto a España, Jiménez apuntó que la prevalencia de esta enfermedad es del 10,2 por ciento entre personas entre 40 y 79 años, y el 70 por ciento de ellos permanecen sin diagnosticar. "Se trata de un problema de salud de magnitud importante, con tendencia creciente y con diagnóstico tardío, al que hay que dar una respuesta para minimizar daño y dependencia que provoca". Asimismo, destacó la carga social que conlleva esta enfermedad, ya que, según señaló, se estima que en España en coste social asociado a esta dolencia equivale al 0,2 por ciento del PIB.

En este sentido, la ministra apuntó que el principal factor de riesgo es la exposición a la inhalación al humo del tabaco ambiental y la exposición pasiva. "La relación entre consumo de tabaco y EPOC es irrefutable, ya que los datos muestran que en el 80 por ciento de los pacientes con limitación crónica al flujo aéreo existen antecedentes de consumo de tabaco", dijo. En España fuman a diario el 26,44 por ciento de la población mayor de 16 años (31,56 por ciento de los hombres y 21,51 por ciento de las mujeres.

Por ello, la ministra indicó que, aunque ha descendido el porcentaje de personas que fuman, son necesarias políticas activas de prevención de tabaquismo. "España es hoy uno de los países de la Unión Europea que tiene una legislación más permisiva en cuanto al consumo de tabaco en establecimientos públicos, mientras que en países como Italia, Francia, Reino Unido, Holanda o Suecia tienen legislaciones que prohíben el consumo de tabaco en estos espacios". 

En este sentido, alertó de que "hoy la realidad muestra que se fuma en cuatro de cada cinco establecimientos, una cifra muy alta si se considera que en España no fuma el 75 por ciento de la población".

Respecto al Real Decreto acerca del etiquetado de los productos del tabaco, señaló que permitirá incluir en las cajetillas pictogramas alusivos a los efectos del tabaco sobre el organismo, como ya aparece en otros países.

EPOC, hasta el 10% de las consultas de atención primarias

Por su parte, el director del programa de epidemiología e investigación clínica de la Fundación Claude-Cimera, el doctor Joan Soriano Ortiz, añadió que se estima que la EPOC mata cada año a 18.000 personas, y supone la quinta muerte en hombres y la séptima en mujeres. En cuanto a la carga asistencial, señaló que conlleva 58.000 visitas médicas por millón de habitantes, en concreto, entre el siete y el diez por ciento de Atención Primaria y más del 30 por ciento de la consulta de Neumología. 

Asimismo, explicó que en 2060 se llegará al envejecimiento máximo de la población, y se observará un mayor incremento de todas las enfermedades crónicas, que será consecuencia del tabaco en gran parte, que mata actualmente a 50.000 personas y la mitad están en edad activa. 

En cuanto a la estrategia, el coordinador científico de la iniciativa, el doctor Julio Ancochea Bermúdez, señaló que supone un instrumento para que todos los ciudadanos tengan acceso a la misma atención, y para conseguir un equilibrio entre las evidencias científicas y las expectativas de los ciudadanos. Entre los objetivos, destacó el de reducir la incidencia de esta enfermedad mediante una reducción de un 23 por ciento del consumo de tabaco en jóvenes de entre 16 y 24 años y retrasar medio año la edad de inicio, entre otras medidas.

Asimismo, entre las iniciativas de esta estrategia destaca la de ofrecer programas de deshabituación tabáquica, y valorar en su caso la financiación o cofinanciación del tratamiento farmacológico, así como implantar dispositivos de oxigenoterapia que permitan la movilidad del paciente. 

"Hay contradicciones y paradojas, y es que aunque tenemos el mejor programa de trasplante pulmonar del mundo, y al mismo tiempo existen problemas de coordinación entre el médico de Atención Primaria y el neumólogo, o no tenemos un técnico o una enfermera que realice una espirometría que se sostenga en criterios de calidad", denunció.