África importa enfermedades de los países ricos
La diabetes, la obesidad y el tabaquismo ya no son sólo cosa de ricos. Las enfermedades del ‘primer mundo’ están pisando fuerte en los países en vías de desarrollo, hasta el punto de que la diabetes mata en Kenia a más gente que el sida.
Las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que el 80% de los nuevos casos de cáncer, diabetes y enfermedades cardiovasculares suceden en países en vías de desarrollo, y no en los occidentales.
Unas cifras alarmantes que en África además cuentan con la desventaja de que los esfuerzos se concentran en las llamas enfermedades contagiosas, como la malaria, el sida o la tuberculosis.
Las conclusiones que saca la OMS tras observar las tendencias en el continente negro son demoledoras, y el organismo avisa además de la falta de acción para poner coto a epidemias que surgieron hace unos años con la importación del sedentario modo de vida occidental.
En los 46 países africanos que el organismo vigila se prevé que las enfermedades no contagiosas –como así se conocen la diabetes, el cáncer, el tabaquismo o el sobrepeso, entre otras- supongan el 46% de las muertes en 2030, frente al 25% que representaban en 2004.
Las ‘enfermedades de los ricos’ llevan años tocando a la puerta del continente negro, constata que seguirán haciéndolo mientras continúe el modelo de desarrollo económico de los países africanos, basado en la migración a las ciudades y en la importación de la dieta y modo de vida occidentales.
Con el progreso, los africanos se han convertido en más sedentarios, comen más grasas y azúcares e imitan los ‘vicios’ occidentales como el alcohol y el tabaco, lo que les convierte en víctimas potenciales de la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
Unos comportamientos poco saludables que, además, están poniendo al límite los ya de por sí deficitarios sistemas sanitarios del continente.
Cada vez más obesos
Hoy por hoy la OMS estima que en torno a 1.000 millones de personas son obesas en todo el mundo, una tendencia que, de continuar así, se traducirá en 1.500 millones de personas con sobrepeso en 2015.
Estima que el sobrepeso y la obesidad están aumentando "de forma dramática" en los países de renta media y baja, debido a la mayor ingesta de azúcares, grasas, sal.
A pesar de que paradójicamente en muchos países africanos como Etiopía, Kenia o Sudán todavía no se haya erradicado la hambruna que azota con frecuencia debido a las sequías cíclicas.
El uso de tabaco es un factor de riesgo que incide en la aparición de la mayor parte de enfermedades no contagiosas, como infartos, cáncer, diabetes y asma, entre otras.
"El tabaquismo en África es más que un problema de salud", al tiempo que afirman que es "un problema de desarrollo también".
En opinión del organismo, el tabaco "engendra pobreza, matando a las personas en sus años más productivos, consume además los ingresos de las familias y su presupuesto sanitario.
El dinero gastado en tabaco no se gasta en necesidades básicas como la educación, comida o medicinas".
Pero quizás la gran preocupación es que las consideradas en África enfermedades recién llegadas no reciben la atención adecuada en las políticas sanitarias.
Que focalizan sus esfuerzos en la malaria, tuberculosis o el Sida, pandemias arraigadas desde hace décadas en el continente que consumen toda la atención de los Gobiernos.