Se desconoce la causa exacta de la diaforesis. La sudoración excesiva en la zona afectada es causada por la hiperactividad de los nervios relacionados con las glándulas sudoríparas. En concreto, la acetilcolina (una sustancia química del organismo que transmite las señales nerviosas) se libera de las terminaciones nerviosas y estimula la secreción de sudor. La genética también puede ser un factor, ya que el 25%-40% de las personas con diaforesis también tienen un familiar con esta enfermedad.

La sudoración puede ser continua o empezar de repente. Por lo general la sudoración excesiva no se produce como respuesta al ejercicio y no se produce durante el sueño. El estrés emocional, temperaturas elevadas y la digestión de ciertos alimentos pueden agravar la diaforesis.