• Trate de evitar que la piel del bebé se seque demasiado. Hable con el médico sobre la frecuencia del baño. Muchos expertos ahora creen que el baño diario puede ser útil para bebés con eccema. Eso sí, que el agua no esté demasiado caliente, porque seca la piel más rápidamente que el agua tibia
• Utilice jabón y champú suave y utilícelos al final de su baño para que el bebé no esté inmerso en el agua jabonosa. Tan pronto como saque al bebé de la bañera, seque la piel sin frotar y rápidamente aplique una cantidad generosa de crema hidratante o emoliente
• Permita que la piel respire (y no se caliente en exceso) vistiendo al bebé con tejidos naturales, como el algodón. Evite la lana y otros materiales ásperos que puedan irritar una piel muy sensible
• Use un detergente suave, sin fragancia para lavar la ropa y ropa de cama. Evite los suavizantes
• Los cambios rápidos de temperatura pueden empeorar el eczema, así que trate de no dejar que el bebé pase rápidamente de temperaturas altas a bajas o viceversa
• Ayude al bebé a evitar que se rasque. Rascarse y frotarse puede irritar o inflamar la piel y empeorar la situación
• Utilice las sábanas más suaves posibles en la cuna y mantenga las uñas del bebé cortas. Si el bebé los tolera, póngale guantes de algodón o calcetines en las manos
• Durante un brote, puede intentar aplicar compresas frías en el área varias veces al día, seguidas de una crema hidratante

Hable con el pediatra o con un dermatólogo pediátrico. Si la erupción no mejora después de seguir las sugerencias de tratamiento, el médico puede sugerir esteroides tópicos suaves.

Los investigadores están desarrollando nuevos medicamentos, por lo que si el bebé continúa con la condición, acuda al médico para mantenerse al día sobre las soluciones que sean apropiadas para el bebé.