Muchos científicos creen que la celulitis, así como la obesidad, está principalmente determinada por los genes. Sin embargo, también se cree que los factores ambientales, así como de comportamiento, tienen algunos efectos en el desarrollo de la celulitis, como:

• Sobrepeso: Aunque la celulitis aparece también en personas delgadas, el exceso de peso empeora la celulitis
• Embarazo: Los problemas de la celulitis empeoran con el embarazo, por los elevados niveles de estrógenos y progesterona. Como resultado, las mujeres embarazadas ven incrementados los depósitos de grasa, aumentan de peso, retienen líquidos y se debilita la estructura de la fibra. Las formas más eficaces para deshacerse de la grasa corporal y la celulitis y volver a la forma del pre-embarazo son la lactancia materna y el ejercicio
• Envejecimiento: A medida que envejecen las mujeres, se hunde la piel y se arruga. Además, la necesidad de energía del cuerpo disminuye, por lo que hay una mayor acumulación de grasa
• Pobre circulación de la sangre: Cuando se altera el flujo sanguíneo a la zona de almacenamiento de grasa, las fibras de colágeno se dañan debido a la falta de oxígeno y a la acumulación de tóxicos. Las fibras se encogen y espesan, lo que resulta en la apariencia acolchada de las cámaras de grasa. Además, como el oxígeno es necesario para quemar grasas y obtener energía, la grasa en estas áreas poco oxigenadas es la última en ser utilizada. Esta es también la razón por la que la celulitis es muy difícil de eliminar. La mala circulación sanguínea a menudo es causada por el sedentarismo, el tabaquismo y el consumo elevado de cafeína
• Drenaje linfático deficiente: El sistema linfático actúa como un sistema de alcantarillado, filtrando y llevándose los desechos celulares y las toxinas. Si se deteriora, los productos tóxicos se acumulan y se inflan las células de grasa, causando celulitis
• Falta de ejercicio: La celulitis puede ser causada por una alteración del flujo sanguíneo  y del tono muscular bajo la piel, causada por el sedentarismo
• Alto contenido en grasas y consumo de azúcar: Esto a menudo produce un exceso de calorías y de ingesta de grasas, lo que provoca un incremento en la grasa corporal y por lo tanto, la celulitis
• Alergia alimentaria: La alergia alimentaria provoca una variedad de síntomas que incluyen ansia por la comida, aumento de peso, distensión abdominal y retención de líquidos, que empeoran la celulitis
• Alimentos procesados ​​que contienen conservantes, edulcorantes artificiales y otros aditivos: El consumo excesivo de alimentos pre-envasados ​​causa la acumulación de estas toxinas en el cuerpo
• Dietas yo-yo: Estas dietas hacen que una mujer pierda grasa en la parte superior del cuerpo al tiempo que aumenta los depósitos de grasa en las nalgas, los muslos y las caderas, por lo que estas prácticas tienden a hacer que los problemas de celulitis sean peores que antes de hacer dieta
• Exposición al sol: La exposición prolongada al sol acelera el proceso de envejecimiento de la piel