Anorexia Prevalencia de anorexia
La anorexia nerviosa se da en un 0,5-1% de la población y en un varón por cada nueve mujeres. Suele iniciarse en la adolescencia, pero se ha detectado ya en niñas menores de diez años. Algunas anoréxicas realizan excesivos ejercicios físicos, toma de laxantes, vómito autoinducido y/o ayuno, todo con la finalidad de perder (o no ganar) peso.
Esta enfermedad va acompañada de un trastorno afectivo con síntomas como irritabilidad, fragilidad emotiva así como sentimientos de infravaloración, disgusto y tristeza.
Se producen también alteraciones orgánicas como pérdida de la menstruación, mala absorción de nutrientes, problemas óseos por la falta de calcio, problemas circulatorios entre los que destaca la constante sensación de frío, problemas de insomnio que provocan fatiga matinal o problemas intestinales por la ausencia de flujo constante de alimentos.
Pero sin duda los problemas más graves son la distorsión de la realidad y con ella de la propia imagen corporal, así como alteraciones de la conducta como creación de rituales en torno a la comida, rechazo de determinados alimentos, falta de variedad alimentaria, aislamiento o ejercicio excesivo, todo ello con el fin de sentirse mejor.