Aldomet “forte” 500 mg 30 comprimidos
Acción y mecanismo
Antihipertensivo. Agonista alfa2-adrenérgico. Estructuralmente relacionado con las catecolaminas, actúa reduciendo el tono simpático. Puede actuar como falso neurotransmisor.
Farmacocinética
Vía (Oral): Su biodisponibilidad es 20-60% Es absorbido moderadamente, habiendo variaciones interindividuales, las contraciones plasmáticas máximas se obtienen a las 3-5 h (Tmáx: 3-5 h). El tiempo preciso para que aparezca la acción máxima es de 5-6 h, interrumpido el tratamiento, la presión sanguínea retorna a su nivel inicial a las 24-48 h. El grado de unión a proteínas plasmáticas es del 10-12%. Es metabolizado en
en el hígado y tracto gastrointestinal, tanto la metildopa como la metildopamina (metabolito activo) son eliminados mayoritariamente con la orina, 60-70% en forma inalterada. Su semivida de eliminación es bifásica (inicial, 1.3-1.8 h), en la que se elimina más del 90% del fármaco (3.6 h en insuficiencia renal). Es eliminable mediante hemodiálisis o diálisis peritoneal.
Indicaciones
[HIPERTENSION ARTERIAL]: Hipertensión arterial: tratamiento de la hipertensión arterial, generalmente asociado a otros antihipertensivos.
Posología
Vía oral:.
– Adultos: Dosis inicial, 250 mg/8-12 h durante las primeras 48 h, incrementando gradualmente de 250-500 mg a intervalos de 2 ó mas días, hasta un máximo de 3 g/día.
– Ancianos: dosis inicial, 125 mg/12 h incrementando gradualmente (máximo 2 g/día).
– Niños: Dosis inicial, 10 mg/kg/24 h, divididos en 2-4 tomas (máximo diario, 65 mg/kg o 3 g).
– Uso con tiazidas: Si con una administración diaria de 2g no puede mantenerse el control de la presión arterial, se recomienda añadir un diurético tiazídico. Para evitar un descenso excesivo de la tensión, se podrá elegir entre reducir las dosis de metil-dopa al 50% o continuar con la dosis completa y añadir la tiazida en pequeños incrementos. Asimismo, la metildopa puede incorporarse a un tratamiento antihipertensivo de pacientes que estén tomando tiazidas, en este caso la dosis de metildopa debe limitarse inicialmente a no más de 250 mg diarias durante las primeras 48 h y aumentada gradulamente a intervalos mínimos de 2 días hasta respuesta adecuada.
– Paso de un tratamineto con otros agentes antihipertensivos a metildopa: Puede iniciarse tratamiento en pacientes tratados con gangliopléjicos o guanetidina, en cuyo caso se disminuirá progresivamente la posología de estos agentes, aumentando la de la metil-dopa. El tratamiento también puede iniciarse en la mayoría de los pacientes bajo tratamiento con agentes como reserpina, otros derivados de la rauwolfia, hidralazina o inhibidores de la monoaminooxidasa, suprimiendo estas medicaciones y empezando con una dosis inicial de 250 mg al día, incrementada según exigencias, a intervalos no inferiores a 2 días.
Contraindicaciones
– Hipersensibilidad al medicamento.
– Pacientes sometidos a tratamientos con inhibidores de la monoamino oxidasa.
– [PORFIRIA].
– [FEOCROMOCITOMA].
Precauciones
[CIRROSIS HEPATICA], [INSUFICIENCIA HEPATICA]: La metildopa está contraindicada en las enfermedades hepáticas, tales como hepatitis aguda y cirrosis activa o hepatotoxicidad por metildopa. La administración de metildopa durante un período de 2 a 3 meses puede producir alteraciones hepáticas como anormalidades en los niveles de fosfatasa alcalina, AST, ALT o bilirrubina. También se puede acompañar de ictericia. Se ha informado además de algunos casos de necrosis hepáticas fatales. Se recomienda monitorizar la funcionalidad hepática durante las primeras 6-12 semanas. En caso de que se produzcan estos cambios hepáticos, se debe suspender el tratamiento de la metildopa y no reiniciar el tratamiento.
.[INSUFICIENCIA RENAL]. Los metabolitos activos de la metildopa se eliminan por vía renal, por lo que en caso de insuficiencia renal se puede producir una acumulación de los mismos en el organismo y puede generarse una hipotensión.
– Test de Coombs: Algunos pacientes bajo tratamiento continuado con metildopa dan positivo el test de Coombs directo. La incidencia es de 10-20%. Un test Coombs positivo aparece raramente en los primeros seis meses de tratamiento con metildopa, y si no se encuentra antes de los 12 meses, no es posible que aparezca con la administración continuada. Este fenómeno está también relacionado con la dosis, ocurriendo la más baja incidencia en pacientes que toman 1 g de metildopa, o menos, al día. Una negativización del test de Coombs positivo aparece semanas o meses después de la suspensión del medicamento.
– Anemia hemolítica: Anemia hemolítica adquirida se ha observado rara vez en relación con el tratamiento con metildopa. Cuando haya síntomas que indican la posibilidad de anemia, se deben efectuar determinaciones de hemoglobina y hematocrito. Si se confirma la anemia, se debe investigar por estudios de laboratorio si hay hemolisis. La evidencia de anemia hemolítica es una indicación para suspender el tratamiento con metildopa.
ADVERTENCIAS SOBRE EXCIPIENTES:
– Este medicamento contiene propilenglicol. A dosis superiores a 200 mg/kg en niños y 400 mg/kg en adultos puede producir síntomas parecidos a los del alcohol, por lo que puede disminuir la capacidad para conducir o manejar maquinaria.
Advertencias/consejos
CONSEJOS AL PACIENTE:
– Comunique si experimenta movimientos involuntarios, aumento de peso considerable (2 kg/semana), fiebre, infección o cambio de humor (estado depresivo), color amarillo de la piel u ojos, dolor abdominal o articular.
– Durante los primeros días de tratamiento puede ser aconsejable tomar el fármaco por la noche, para reducir las consecuencias de algunas reacciones adversas (somnolencia, hipotensión y sedación). Estos efectos adversos suelen remitar a medida que el tratamiento progresa.
– Procure no conducir hasta que la sedación desaparezca.
– No cambie bruscamente de postura (ej: pasar de sentado a erguido) para evitar la hipotensión ortostática.
– La orina expuesta al aire puede oscurecerse.
CONSIDERACIONES ESPECIALES:
– Controle posibles signos y síntomas de depresión.
– Es aconsejable hacer periódicamente recuentos sanguÍneos completos para vigilar el riesgo de anemia hemolítica y discrasias sanguíneas.
– Realizar Coombs directo al comienzo y a los 6-12 meses, así como pruebas de función hepática, durante las primeras 6-12 semanas de tratamiento, o si el paciente presenta fiebre injustificada.
– Controle el peso del paciente y la formación de edemas.
– La presencia de hipotensión ortostática puede indicar un ajuste de la dosis.
– Después de 2-3 meses de tratamiento se han observado casos de tolerancia al efecto hipotensor del fármaco. La adición de un diurético tiazídico o la elevación de la dosis de metildopa, generalmente restablece el efecto hipotensor.
Interacciones
– Anticonceptivos orales (etinilestradiol, mestranol): hay estudios en los que se ha registrado posible inhibición del efecto hipotensor.
– Antidepresivos tricíclicos (amitriptilina): hay estudios en los que se ha registrado posible inhibición del efecto hipotensor.
– Cefalosporinas (cefradina, cefazolina): hay algún estudio en el que se ha registrado potenciación de la toxicidad.
– Digoxina: hay estudios en los que se ha registrado posible potenciación de la toxicidad.
– Disulfiramo: hay un estudio en el que se ha registrado inhibición del efecto hipotensor por una posible inhibición de la dopamina betahidroxilasa, impidiendo el paso de la metildopa a su forma activa.
– Efedrina: hay un estudio en el que se ha registrado posible inhibición del efecto midriático de la efedrina.
– Fenfluramina: hay estudios en los que se ha registrado posible inhibición de su efecto.
– Fenilpropanolamina: hay un estudio en el que se ha registrado posible aparición de hipertensión.
– Fenoxibenzamina: hay estudios en los que se ha registrado posible potenciación de la toxicidad.
– Haloperidol: hay estudios en los que se ha registrado posible inhibición del efecto de ambos fármacos.
– Levodopa: hay estudios en los que se ha registrado posible potenciación de la acción y/o toxicidad.
– Oxazepam: hay un estudio en el que se ha registrado posible inhibición del efecto hipotensor.
– Salbutamol: hay estudios en los que se ha registrado posible potenciación de la toxicidad con síntomas de insuficiencia cardíaca.
– Sales de hierro (gluconato hierro, sulfato hierro): hay estudios en los que se ha registrado posible inhibición del efecto hipotensor por reducción de la absorción oral de metildopa.
– Sales de litio (carbonato de litio): hay estudios en los que se ha registrado posible potenciación de la toxicidad del litio por un posible aumento de su captación cerebral.
– Trifluoperazina: hay un estudio en el que se ha registrado potenciación de la toxicidad con presencia de hipertensión.
Este medicamento puede alterar los valores de las siguientes determinaciones analíticas:
– Sangre: aumento (biológico) transaminasas, fosfatasa alcalina, bilirrubina, lactato-deshidrogenasa (LDH), retención de bromosulftaleína, prolactina y triglicérido; aumento (interferencia clínica) de creatinina y de ácido úrico (variable). Reducción (biológica) de albúmina y noradrenalina; reducción (interferencia analítica) de glucosa.
– Orina: aumento (interferencia analítica) de adrenalina y de catecolaminas totales. Reducción (biológica) de ácido 5-hidroxiindolacético.
Embarazo
Categoría B de la FDA. Los estudios en animales no han registrado efectos adversos en el feto. No se han realizado estudios adecuados y bien controlados en humanos, no obstante, en algunos casos se ha asociado el uso de metildopa durante el embarazo a una reducción de la circunferencia craneal (entre la 16-20 semana de gestación), reducción de la presión sistólica durante los 2-3 primeros días y a temblores en el recién nacido. Se ha considerado como tratamiento de elección en hipertensión crónica en embarazadas, no obstante, algunos clínicos recomiendan que la terapia no sea iniciada entre las semanas 16 y 20 de la gestación.
Lactancia
Este medicamento es excretado en pequeñas cantidades con la leche materna. La Academia Americana de Pediatría considera la metildopa compatible con la lactancia materna.
Niños
Aunque no se dispone de suficiente experiencia clínica en este grupo de edad, no se han descrito problemas específicamente pediátricos. Uso aceptado.
Ancianos
Los ancianos pueden ser más sensibles a los efectos hipotensores y sedantes de la metildopa. Se recomienda un especial control clínico en ancianos con insuficiencia renal, hepática y cardiaca, pudiendo ser necesario un ajuste de dosis. Asimismo, pueden producirse casos de hipertensión de rebote al suspender bruscamente el tratamiento.
Efectos sobre la conducción
Se ha observado sedación transitoria al comienzo del tratamiento o después de aumentar la dosis. Mucha precaución al conducir.
Reacciones adversas
Los efectos adversos de este medicamento son, en general, frecuentes aunque reversibles y transitorios.
El perfil toxicológico de este fármaco es similar al del resto de vasodilatadores. En la mayor parte de los casos, los efectos adversos son una prolongación de la acción farmacológica y afectan principalmente al sistema cardiovascular. El 60% de los pacientes experimenta algún tipo de efecto adverso. Los efectos adversos más característicos son:
-Frecuentemente (10-25%): somnolencia, especialmente al principio del tratamiento y después de un incremento de dosis; mareos, hipotensión ortostática, edema (con aumento de peso. Puede mejorar con la administración concomitante de un diurético. Si progresara o aparecieran signos de congestión pulmonar, se suspenderá el tratamiento), náuseas, fatiga, cefalea, impotencia, reducción de la líbido, sequedad de boca y prueba de Coombs positiva pero solo una proporción desarrollará anemia hemolítica.
-Ocasionalmente (1-9%): reducción de la concentración mental, amnesia, psicosis, depresión, alteraciones del sueño, pesadillas, parestesia, movimientos involuntarios y parkinsonismo, en pacientes con enfermedad cerebrovascular bilateral grave.
-Raramente (<1%): bradicardia, colapso, empeoramiento de angina, de pecho, alteraciones digestivas (náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento, pancreatitis, parotiditis), trombocitopenia, leucopenia, hepatitis y necrosis hepática.
-Excepcionalmente (<<1%): lupus eritematoso, erupciones liqueniformes y exantemáticas, necrolisis epidérmica tóxica, fiebre, mialgia, artralgia, nocturia, congestión nasal, hiperprolactinemia, mastalgia, ginecomastia, galactorrea,
amenorrea y reducción de la líbido. En casos muy raros se ha observado glositis o “lengua negra”.
El tratamiento debe ser suspendido inmediatamente en el caso de que el paciente experimente algún episodio de fiebre, trombocitopenia o leucopenia o movimiento involuntario coreoatetósico.
Sobredosis
– Síntomas: hipotensión y sedación excesiva.
– Tratamiento: No existe antídoto específico. Si la ingestión es reciente, el lavado gástrico o el vómito provocado pueden reducir la absorción; si ha transcurrido algún tiempo, las infusiones pueden ayudar a promover la excreción urinaria. En todo caso, el tratamiento debe de ser sintomático, con especial atención al ritmo y gasto cardíacos, volumen sanguíneo, balance electrolítico, íleo paralítico, función urinaria y actividad cerebral.