Amsacrina
Indicaciones
Inducción y mantenimiento de la remisión en la leucemia aguda
del adulto.
Posología
I.V (perfusión): Inducción de la fase de remisión: la dosis
habitual es de 90 mg/m2, cada día durante 5 días consecutivos
(dosis total de 450 mg/m2 por ciclo de tratamiento).
Si la biopsia de médula ósea realizada al sexto día muestra una
celularidad superior al 50% y el recuento de blastocitos se situa
por encima del 30%, el tratamiento se ampliará otros 3 días.
En función de la eficacia del primer ciclo en producir
mielosupresión, los ciclos subsiguientes, se aplicarán cada 2
4 semanas. En los casos que después del primer ciclo no se haya
obtenido una médula hipocelular, la dosis diaria puede elevarse
paulatinamente a 120 mg/día, siempre que ello no esté
contraindicado.
En insuficiencia renal o hepática la dosis se disminuirá en un
20-30%.
Fase de mantenimiento: tercera parte de la fase de inducción, en
infusión intravenosa única o fraccionada en tres días, repitiendo
cada 3-4 semanas.
En función de la flebitis que puede aparecer con dosis superiores
a 70 mg/m2, debe diluirse en 500 ml de dextrosa al 5% e infundirse
durante 60-90 minutos. La extravasación puede producir irritación
grave o necrosis.
Contraindicaciones
Embarazo y lactancia.
Precauciones
Realizar hemogramas completos frecuentes.
Deben realizarse monitorizaciones periódicas de la médula ósea, función hepática, renal, cardíaca y del SNC, expecialmente en aquellos con alteración preexistente.
Interacciones
No se debe utilizar junto con quimioterapia inmunosupresora.
La administración simultánea con diuréticos deplectores de
potasio, antibióticos aminoglucosídicos u otros fármacos
nefrotóxicos pueden inducir hipopotasemia que aumenta el riesgo
de toxicidad cardiaca.
Reacciones adversas
Hematopoyeticos: Leucopenia, por lo general es dosis-limitante. Por
lo general es transitoria y alcanza su punto más bajo alrededor de
los 12 días y revierte a los 25-28 días.
Gastrointestinales: náuseas, vómitos, estomatitis, esofagitis.
Sistema Nervioso Central: convulsiones.
Cardiacos: arritmias ventriculares e insuficiencia cardiaca
congestiva. por lo general reversibles y al comienzo de la infusión.
Esta toxicidad puede estar aumentada en pacientes con hipopotasemia o
en los previamente tratados con antraciclinas (doxorrubicina, etc).
Hepáticos: elevaciones transitorias de bilirrubina sérica y
fosfatasa alcalina, acompañadas a veces, de ictericia colestática.
Excepcionalmente, encefalopatía hepática y coma.
Cutáneos: irritación local, necrosis y flebitis. Relacionados con
la concentración de fármaco perfundido en la unidad de tiempo.
Renales: Ocasionalmente, hematuria y anuria en pacientes con
insuficiencia renal grave. Hiperuricemia producto de la citolisis.