Atripla 30 comprimidos recubiertos
Acción y mecanismo
– [ANTIVIRAL ANTI-RETROVIRUS], [INHIBIDOR DE LA RETROTRANSCRIPTASA]. Asociación de tres fármacos inhibidores de la transcriptasa inversa, el efavirenz (inhibidor de estructura no nucleosídica), la emtricitabina (inhibidor de estructura nucleosídica derivado de citidina) y el tenofovir disoproxil (inhibidor de estructura nucleotídica derivado de adenosina monofosfato).
La emtricitabina y el tenofovir son profármacos que se activan en el organismo al fosforilarse a emtricitabina trifosfato y tenofovir difosfato.
Los fármacos activos inhiben a la retrotranscriptasa del virus VIH-1, interrumpiendo la síntesis de la cadena del DNA viral y la replicación del virus.
Indicaciones
– [SIDA]. Tratamiento de la infección por el VIH-1 en adultos con supresión virológica a niveles de ARN del VIH-1 inferiores a 50 copias/ml tras terapia antirretroviral combinada actual durante más de tres meses.
Los pacientes con fallos virológicos previos a otros tratamientos antirretrovirales o con cepas virales con resistencia significativa a efavirenz, emtricitabina o tenofovir no deben usar este medicamento.
Posología
DOSIFICACIÓN:
– Adultos, oral: 1 comprimido/24 horas.
– Niños, oral: No se ha evaluado la seguridad y eficacia en niños y adolescentes menores de 18 años.
NORMAS PARA LA CORRECTA ADMINISTRACIÓN:
Los comprimidos deben ingerirse enteros con un vaso de agua. Se aconseja administrar los comprimidos con el estómago vacío, debido a que los alimentos podrían aumentar la absorción y las reacciones adversas de efavirenz. Además se aconseja tomar los comprimidos por la tarde para reducir el impacto de las reacciones adversas del efavirenz.
Dosis omitidas: Si el paciente se olvida de tomar una dosis, deberá hacerlo inmediatamente cuando se acuerde, a menos que falten menos de 12 horas para la siguiente dosis.
Contraindicaciones
– Hipersensibilidad a efavirenz, emtricitabina, tenofovir o a cualquier componente del medicamento.
– Insuficiencia renal moderada a grave (CLcr < 50 ml/minuto). En pacientes con insuficiencia renal de moderada a grave se debe proceder a reajustar la posología del tenofovir y de la emtricitabina, ajuste que no es posible con estos comprimidos. En caso de insuficiencia renal moderada a grave sería necesario recurrir a medicamentos con tenofovir y emtricitabina como principios activos únicos.
– Insuficiencia hepática grave (Clase C de Child-Pugh). No se ha evaluado la seguridad y eficacia de este medicamento en estos pacientes, por lo que se aconseja evitar su utilización.
Precauciones
ADVERTENCIAS SOBRE EXCIPIENTES:
– Este medicamento contiene sales de sodio. Para conocer el contenido exacto en sodio, se recomienda revisar la composición.
* Las formas farmacéuticas parenterales con un contenido en sodio inferior a 1 mmol/dosis (23 mg/dosis) se considerarán exentas en sodio.
* Las formas farmacéuticas orales y parenterales con cantidades de sodio superiores a 1 mmol/dosis (23 mg/dosis) deberán usarse con precaución en pacientes con dietas pobres en sodio.
– [INSUFICIENCIA RENAL]. No es necesario proceder a un reajuste posológico en pacientes con insuficiencia renal leve (CLcr entre 50-90 ml/minuto), pero en caso de insuficiencia renal moderada a grave (CLcr < 50 ml/minuto) se deberán disminuir las dosis de tenofovir y emtricitabina, por lo que no se podrá utilizar este medicamento de asociación fija (Véase Contraindicaciones).
Por otra parte, la utilización de tenofovir se ha asociado con algunos casos de daño renal, con incremento de los niveles de creatinina, hipofosfatemia, tubulopatía proximal e incluso insuficiencia renal.
Por lo tanto, se recomienda evaluar la funcionalidad renal (CLcr y niveles de fosfato) antes de iniciar el tratamiento, y a continuación periódicamente cada cuatro semanas durante el primer año de tratamiento y cada tres meses durante el segundo año. Esta monitorización podría ser más frecuente en pacientes con insuficiencia renal leve (CLcr entre 50-90 ml/minuto) preexistente.
En el caso de pacientes que experimenten una disminución del CLcr por debajo de 50 ml/minuto o un valor de fosfato sérico inferior a 1,5 mg/dl, se recomienda volver a monitorizar la funcionalidad renal, así como los niveles de potasio, glucosa sérica y glucosa en orina, al cabo de una semana.
– [INSUFICIENCIA HEPATICA]. El efavirenz se elimina mediante metabolismo hepático a través del CYP3A4, por lo que en caso de insuficiencia hepática podría acumularse, dando lugar a hepatotoxicidad. Se recomienda por lo tanto extremar las precauciones en pacientes con insuficiencia hepática leve a moderada (clase A ó B de Child-Pugh), controlando al paciente por si apareciesen reacciones adversas del efavirenz, fundamentalmente de naturaleza neurológica, y evitar la utilización en pacientes con insuficiencia hepática grave (clase C de Child-Pugh; Véase Contraindicaciones).
Por otra parte, hay que tener en cuenta que los pacientes con [HEPATOPATIA] previas, tales como insuficiencia hepática, [HEPATITIS CRONICA] activa o coinfección por [HEPATITIS B] o [HEPATITIS C], suelen mostrar cierta predisposición a presentar empeoramientos de la funcionalidad hepática durante el tratamiento antirretroviral combinado, pudiendo aparecer reacciones adversas incluso fatales. Este efecto podría ser aún mayor si el paciente está en tratamiento con otros fármacos hepatotóxicos. Por lo tanto, se aconseja monitorizar periódicamente los parámetros de funcionalidad hepática, especialmente las transaminasas. Si las transaminasas aumentan más de 5 veces el límite superior de normalidad se aconseja evaluar la necesidad de continuar el tratamiento.
En ocasiones, en pacientes coinfectados por el VIH y el VHB, se han descrito reagudizaciones de la hepatitis B al suspender la terapia antirretroviral combinada, debido probablemente a que tanto la emtricitabina como el tenofovir presentan actividad frente al virus VHB. La reagudización suele expresarse como un aumento de los niveles de transaminasas y de ADN viral, que puede dar lugar a agravamiento del estado hepático e incluso insuficiencia hepática. Por lo tanto, los pacientes coinfectados por los virus VIH y VHB deberán ser estrechamente vigilados durante al menos 4 meses después de la suspensión del tratamiento, por si apareciesen síntomas de reactivación de la hepatitis. Se desconoce si al administrar de nuevo emtricitabina/tenofovir podría limitarse la progresión de la reagudización de la hepatitis.
– [DEPRESION] y otros cuadros psiquiátricos como [PSICOSIS]. La utilización de efavirenz se ha asociado con la aparición de depresión grave, psicosis, delirio, tendencias suicidas y otros trastornos psiquiátricos, especialmente en pacientes con historial de enfermedades mentales. Estos pacientes deberán ser vigilados estrechamente, y en el caso de observarse una agudización de los síntomas, se valorará la necesidad de continuar el tratamiento.
– [EPILEPSIA]. El efavirenz podría reducir el umbral de convulsiones per se e interaccionar con la medicación antiepiléptica, por lo que se aconseja vigilar a los pacientes epilépticos.
– [OSTEOPOROSIS]. La utilización prolongada de tenofovir se ha asociado en algunos ensayos clínicos con una disminución ligera de la densidad mineral ósea en cadera y columna, aunque no se incrementó la incidencia de fractura. Se recomienda controlar la densitometría ósea, especialmente en mujeres postmenopáusicas que reciban este medicamento durante períodos prolongados de tiempo.
– [DISLIPEMIA]. La terapia antirretroviral combinada ha dado lugar en ocasiones a alteraciones metabólicas, como [HIPERCOLESTEROLEMIA] o [HIPERTRIGLICERIDEMIA]. Se recomienda controlar periódicamente los niveles de colesterol y triglicéridos.
– [DIABETES]. La terapia antirretroviral combinada podría ocasionar resistencia a la insulina e hiperglucemia, por lo que se aconseja monitorizar con cuidado los niveles de glucemia plasmáticos.
– Acidosis láctica y hepatotoxicidad. Los análogos de nucleósidos y nucleótidos han dado lugar en ocasiones a reacciones adversas graves como hepatomegalia grave con esteatosis hepática y acidosis láctica potencialmente mortal. Estas reacciones adversas suelen aparecer al cabo de varios meses de tratamiento.
Estas reacciones adversas son más comunes en pacientes con [HEPATOMEGALIA], [HEPATITIS] no vírica u otras hepatopatías, así como en mujeres con [OBESIDAD]. También parecen ser factores de riesgo la hepatitis C y el tratamiento con interferón alfa y ribavirina. Se recomienda extremar las precauciones, vigilando al paciente por si apareciesen síntomas indicativos de esta complicación. Los casos leves de acidosis láctica cursan con náuseas, vómitos y dolor abdominal, que pueden ir acompañados de malestar general, anorexia con adelgazamiento y alteraciones de la respiración, mientras que en los graves aparece pancreatitis, elevación de lactato sérico, insuficiencia renal o hepática o esteatosis hepática.
En aquellos casos en los que se produzca un incremento brusco de las transaminasas, hepatomegalia progresiva o síntomas de acidosis metabólica o láctica de origen desconocido, se recomienda suspender el tratamiento.
Se debe asegurar que el incremento de la ALT no se debe a la propia respuesta al tratamiento, por lo que deberá estudiarse la mejora de otros marcadores analíticos de la hepatitis B.
– Erupción cutánea. El tratamiento con inhibidores de la transcriptasa se ha asociado en ocasiones a la aparición de erupciones cutáneas de gravedad leve a moderada, que solían resolverse al suspender el tratamiento y que respondían bien a la administración de corticoides y/o antihistamínicos. No obstante, en el 1% de los pacientes que recibieron efavirenz se produjeron erupciones cutáneas graves, con ampollas, descamación cutánea y ulceraciones, y en el 0,1% de los casos se produjeron reacciones potencialmente fatales como el síndrome de Stevens-Johnson o el eritema mutiforme. Por lo tanto, es aconsejable suspender el tratamiento si en la piel del paciente aparecen ampollas, descamación, lesiones en la mucosa o fiebre.
– Lipodistrofia. El tratamiento combinado con antirretrovirales ha dado lugar en ocasiones a redistribución del contenido adiposo de los pacientes con VIH, si bien se desconoce el efecto clínico que esto podría tener a largo plazo. La lipodistrofia es más frecuente en pacientes ancianos, en aquellos con trastornos metabólicos previos o en el caso de tratamientos antirretrovirales prolongados.
– Daño mitocondrial. Los inhibidores de la retrotranscriptasa con estructura nucleosídica o nucleotídica podrían producir daño mitocondrial, tal y como ha quedado manifestado en niños VIH negativos que sufrieron exposiciones gestacionales y/o postparto a estos fármacos. La lesión mitocondrial se puede manifestar con síntomas hematológicos (anemia, neutropenia), metabólicos (acidosis láctica, hiperlipasemia) o neurológicos (convulsiones, hipertonía y alteraciones del comportamiento). Estos últimos suelen aparecer de forma tardía. Los síntomas hematológicos y metabólicos suelen ser transitorios, pero no se sabe si las alteraciones neurológicas podrían ser permanentes. Se recomienda por tanto realizar un seguimiento analítico y clínico de todos aquellos neonatos que hayan estado expuestos a este medicamento durante el embarazo, y en el caso de observarse síntomas significativos, se investigará el posible daño mitocondrial.
– Osteonecrosis. Las terapias antirretrovirales combinadas en pacientes con VIH avanzado se han asociado a la aparición de osteonecrosis. Si bien es cierto que la osteonecrosis está relacionada también con otros factores como consumo de corticosteroides, alcoholismo, inmunosupresión grave y/o obesidad, se aconseja extremar las precauciones y evaluar a los pacientes que refieran dolor osteoarticular, rigidez articular o dificultades para moverse.
– Transmisión del VIH. Se desconoce si el tratamiento con antirretrovirales podría reducir el riesgo de contagio del VIH, por lo que se aconseja continuar con las medidas habituales de precaución para evitar contagios accidentales.
– Síndrome de reconstitución inmune. En las primeras semanas o meses después de iniciar un tratamiento antirretroviral en pacientes con inmunodeficiencia severa, podría aparecer un cuadro caracterizado por una respuesta inmunitaria de naturaleza inflamatoria frente a patógenos oportunistas o latentes, que podrían dar lugar a graves síntomas, como la retinitis por citomegalovirus, infecciones generalizadas por micobacterias o neumonía por Pneumocystis carinii. En caso de desarrollarse síntomas inflamatorios, se recomienda iniciar un tratamiento sintomático.
Advertencias/consejos
CONSEJOS AL PACIENTE:
– No se ha comprobado si los tratamientos antirretrovirales pueden reducir el riesgo de contagio de VIH a otras personas.
– Se aconseja tomar los comprimidos con el estómago vacío y por la tarde, todos los días más o menos a la misma hora.
– Se recomienda no suspender el tratamiento de forma brusca.
– Es común al inicio del tratamiento la aparición de mareo, insomnio, somnolencia, cefalea, pesadillas e incapacidad para concentrarse, que suelen remitir a los pocos días.
– Se aconseja avisar al médico y/o al farmacéutico si apareciese dolor articular u óseo, dificultad para moverse, erupciones cutáneas, ampollas o descamación cutánea, especialmente si se acompañan de fiebre.
CONSIDERACIONES ESPECIALES:
– El tratamiento con este medicamento debe ser iniciado por un médico con experiencia en el tratamiento del SIDA.
– Se debe evaluar la funcionalidad renal antes de iniciar el tratamiento, y periódicamente cada cuatro semanas el primer año de tratamiento y cada tres meses el segundo año. En caso de que el paciente experimentase insuficiencia renal moderada a grave (CLcr < 50 ml/minuto), se sustituirá este medicamento por otros que permitan un reajuste posológico individualizado del tenofovir y la emtricitabina.
– Se recomienda monitorizar periódicamente los parámetros de funcionalidad hepática y los niveles de transaminasas. Si las transaminasas superasen 5 veces el límite superior de normalidad, se evaluará la suspensión del tratamiento.
– Los pacientes coinfectados por VIH y VHB deberán ser vigilados al menos durante 4 meses tras suspender el tratamiento antirretroviral combinado, por si apareciesen síntomas de reactivación de la hepatitis.
– Se aconseja vigilar a los pacientes con trastornos psiquiátricos, ya que podrían experimentar agravamiento de su enfermedad y tendencias suicidas.
– En el caso de que el paciente desarrolle erupciones cutáneas, acompañadas de ampollas, descamación cutánea o fiebre, se aconseja suspender el tratamiento.
– Se aconseja evaluar el riesgo de osteonecrosis en pacientes que notifiquen dolor osteoarticular, rigidez articular o dificultad para moverse.
– Se recomienda realizar controles clínicos y analíticos de aquellos bebés cuyas madres hayan recibido un antirretroviral con estructura nucleosídica o nucleotídica durante la gestación.
– Podría ser aconsejable realizar densitometrías óseas periódicas, especialmente en mujeres postmenopáusicas en tratamiento con tenofovir durante períodos prolongados de tiempo.
– El efavirenz podría dar falsos positivos en consumo de cannabis.
Interacciones
– Antagonistas del calcio. El efavirenz podría reducir los niveles plasmáticos de los antagonistas del calcio, al inducir al CYP3A4. Podría ser necesario un aumento de la dosis del antagonista de calcio en función de la respuesta clínica obtenida.
– Anticonceptivos orales. Se han descrito aumentos del AUC del etinilestradiol por efavirenz. No se ha dispone de información que permita conocer bien la posible interacción entre efavirenz y anticonceptivos orales. Ante el riesgo de que se produzca una interacción impredecible, y un embarazo no deseado, se aconseja utilizar medios anticonceptivos de barrera.
– Antifúngicos azólicos. La administración de itraconazol con efavirenz dio lugar a una reducción de los niveles plasmáticos de itraconazol, por lo que podría plantearse el tratamiento con otro antifúngico. Por otra parte, el efavirenz reduce los niveles de voriconazol mientras que éste aumenta los de efavirenz. Podría ser necesario un reajuste posológico que no es posible con este medicamento, por lo que se aconseja evitar su asociación con voriconazol.
– Antirretrovirales. No se ha evaluado la seguridad y eficacia de asociar este medicamento con otros antirretrovirales, por lo que por regla general debería evitarse. Se han descrito las siguientes interacciones a nivel individual:
* Inhibidores de la proteasa. Existen datos muy limitados acerca de la asociación de este medicamento junto con inhibidores de la proteasa, por lo que se recomienda evitar la asociación ante el riesgo de que el efavirenz pudiera reducir los niveles plasmáticos de estos fármacos al inducir su metabolismo. De igual manera, los inhibidores de la proteasa podrían incrementar los niveles plasmáticos de efavirenz, al inhibir su metabolismo hepático.
* Inhibidores de la transcriptasa inversa. El tenofovir podrían incrementarse drásticamente los niveles de didanosina, por lo que se aconseja evitar la asociación. Por otra parte, tampoco se aconseja asociar el efavirenz a otro inhibidor no nucleosídico, ya que no se ha demostrado que mejore la seguridad y eficacia del tratamiento.
Lógicamente, este medicamento no debe asociarse con otros medicamentos que lleven en su composición efavirenz, tenofovir o emtricitabina, así como con otros análogos de citidina como lamivudina, debido a la similitud estructural con emtricitabina.
– Claritromicina. El efavirenz podría disminuir los niveles plasmáticos de claritromicina, por lo que podría ser necesario plantearse la sustitución de claritromicina por otro macrólido como azitromicina, con el que no se ha observado interacción.
– Estatinas. El efavirenz podría reducir los niveles séricos de aquellas estatinas que se metabolicen por el CYP3A4, como atorvastatina, lovastatina o simvastatina. Podría ser necesario un aumento de la posología en función de la respuesta clínica obtenida.
– Inductores enzimáticos. El efavirenz se metaboliza a través del CYP3A4 y del CYP2B6, por lo que aquellos fármacos que induzcan estos enzimas, como rifampicina, carbamazepina, fenobarbital, fenitoína o hipérico, podrían reducir sus niveles plasmáticos, y por tanto sus efectos. Podría ser necesario proceder a un aumento de la dosis de efavirenz, reajuste posológico que no es posible con esta asociación a dosis fija. Por este motivo, se recomienda evitar la asociación de este medicamento con inductores enzimáticos potentes.
– Metadona. El efavirenz podría disminuir los niveles plasmáticos y los efectos de la metadona, por lo que podría ser necesario aumentar la dosis del opiáceo.
– Fármacos nefrotóxicos (aminoglucósidos, anfotericina B, ciclosporina, cisplatino, foscarnet, ganciclovir, tacrolimús, vancomicina). Se debe reducir la posología del tenofovir y la emtricitabina en caso de insuficiencia renal moderada a grave, reajuste posológico que no es posible con las dosis fijas de este medicamento. Se aconseja por tanto extremar las precauciones al asociar este medicamento a fármacos fuertemente nefrotóxicos, monitorizando la funcionalidad renal periódicamente.
– Sertralina. El efavirenz podría disminuir los niveles plasmáticos de sertralina por inducción del CYP3A4, por lo que podría ser necesario aumentar la dosis del antidepresivo.
– Sustratos del citocromo P450 con estrecho margen terapéutico (terfenadina, midazolam, triazolam, pimozida, alcaloides del cornezuelo). El efavirenz se comporta como inhibidor enzimático de ciertos isoenzimas, por lo que podría incrementar los niveles plasmáticos de estos fármacos, con el consiguiente riesgo de reacciones adversas graves y potencialmente fatales. Se recomienda evitar la asociación.
– Alimentos. Los alimentos podrían incrementar la absorción del efavirenz, incrementando las reacciones adversas. Se recomienda por tanto administrar este medicamento con el estómago vacío.
Análisis clínicos
– Cannabis. El efavirenz podría dar falsos positivos en la detección de consumo de cannabis por la técnica del THC de Niveles Múltiples CEDIA DAU con orina.
– Colesterol. Aumento de los niveles séricos.
– Glucosa. Aumento de los niveles séricos.
– Transaminasas. Incremento de los niveles de transaminasas, con valores superiores a 5 veces el límite superior de normalidad en el 2% de los pacientes (ALT) y el 3% de los pacientes (AST).
– Neutrófilos. Disminución del recuento absoluto de neutrófilos, con neutropenia.
– Triglicéridos. Aumento de los niveles séricos.
Embarazo
No se dispone de estudios adecuados y bien controlados en humanos. Existe un registro de mujeres embarazadas tratadas con antirretrovirales para conocer los efectos a largo plazo sobre los niños. En la experiencia post-comercialización sobre 200 pacientes que recibieron efavirenz no se ha observado la aparición de malformaciones congénitas, aunque se notificaron algunos defectos del tubo neural, como meningomielocele. No se pudo establecer relación de causalidad con el efavirenz.
Por otra parte, se han descrito casos de daño mitocondrial, con síntomas hematológicos (anemia, neutropenia), metabólicos (acidosis láctica, hiperlipasemia) o neurológicos (convulsiones, hipertonía y alteraciones del comportamiento) en niños cuyas madres recibieron análogos de nucleósidos o nucleótidos durante el embarazo. Es recomendable realizar un seguimiento clínico y analítico de estos niños, y si apareciesen síntomas clínicamente relevantes, se investigará el posible daño mitocondrial.
Por lo tanto, la administración de este medicamento sólo se acepta en el caso de que no existiendo alternativas terapéuticas más seguras, los beneficios superen los posibles riesgos. Se recomienda de forma general usar métodos anticonceptivos eficaces durante el tratamiento con este medicamento, y mantenerlas durante al menos 12 semanas, como consecuencia de los efectos prolongados de efavirenz.
Lactancia
Se desconoce si efavirenz, tenofovir o emtricitabina se excreta con la leche, y las posibles consecuencias que esto podría tener para el lactante. No obstante, tanto efavirenz como tenofovir se excreta en leche de ratas, e incluso el efavirenz alcanza concentraciones en leche mayores que las concentraciones plasmáticas de la madre. En general, las madres infectadas de SIDA deberán evitar la lactancia materna, ante el riesgo de transmisión del virus, como ante la posibilidad de reacciones adversas asociadas al tratamiento.
Niños
No se ha evaluado la seguridad y eficacia en niños y adolescentes menores de 18 años, por lo que se recomienda evitar la utilización de este medicamento.
Ancianos
Se dispone de una información muy limitada acerca de la eficacia y seguridad de este medicamento en pacientes mayores de 65 años. Teniendo en cuenta que en estos pacientes suele existir una disminución fisiológica de la funcionalidad renal y hepática, se aconseja extremar las precauciones.
Efectos sobre la conducción
El efavirenz, la emtricitabina y el tenofovir podrían dar lugar a mareos. De igual manera, el tratamiento con efavirenz podría ocasionar somnolencia y dificultad para concentrarse. Se recomienda por extremar las precauciones al manejar maquinaria peligrosa, incluyendo automóviles, hasta que se tenga la certeza razonable de que el tratamiento farmacológico no afecta de forma adversa.
Reacciones adversas
Existe una experiencia muy limitada sobre las reacciones adversas de la asociación efavirenz/emtricitabina/tenofovir, pero cabe esperar un perfil de seguridad similar al de cada fármaco por separado.
– Digestivas: muy frecuentes (>10%) [NAUSEAS] (18%); frecuentes (1-10%) [DIARREA] (7%), [VOMITOS], [DOLOR ABDOMINAL], [FLATULENCIA], [SEQUEDAD DE BOCA], [DISTENSION ABDOMINAL], [ANOREXIA], [AUMENTO DEL APETITO]; poco frecuentes (0,1-1,0%) [TRASTORNOS DEL GUSTO], [DISPEPSIA].
– Hepáticas: frecuentes (1-10%) [INCREMENTO DE LOS VALORES DE TRANSAMINASAS] (2-3%).
– Cardiovasculares: frecuentes (1-10%) [SOFOCOS].
– Neurológicas/psicológicas: muy frecuentes (>10%) [MAREO] (25%) y sueños anormales (17%); frecuentes (1-10%) [SOMNOLENCIA] (6%), [INSOMNIO] (8%), [PESADILLAS], [DEPRESION], [EUFORIA], [ESTUPOR], [LETARGO], [CEFALEA] (7%) y [REDUCCION DE LA CONCENTRACION]; poco frecuentes (0,1-1,0%) [AMNESIA], [ATAXIA], [PARANOIA], [DELIRIO], [CONFUSION], [ANSIEDAD], [NERVIOSISMO], [AGRESIVIDAD] y [DESORIENTACION]. Los síntomas neurológicos podían ser relacionados con el efavirenz, y suelen aparecer en los primeros días de tratamiento, resolviéndose en 2-4 semanas. Son especialmente frecuentes e intensos si se toma el efavirenz con alimentos, mientras que la administración a la hora de acostarse reduce su incidencia.
– Respiratorias: poco frecuentes (0,1-1,0%) [DISNEA].
– Alérgicas/dermatológicas: muy frecuentes (>10%) [ERUPCIONES EXANTEMATICAS] (14%); frecuentes (1-10%) [DERMATITIS], [PRURITO], [HIPERPIGMENTACION CUTANEA]; poco frecuentes (0,1-1,0%) [URTICARIA], [SEQUEDAD DE PIEL].
En pacientes tratados con efavirenz se han registrado casos de [ERUPCIONES EXANTEMATICAS] maculopapular, de naturaleza leve a moderada, especialmente en las primeras dos semanas de tratamiento. Normalmente esta erupción desapareció al suspender el tratamiento, y respondía bien a antihistamínicos y corticoides. En algunos casos se han producido reacciones cutáneas graves, potencialmente fatales, como [SINDROME DE STEVENS-JOHNSON] o [ERITEMA MULTIFORME].
– Osteomusculares: [OSTEONECROSIS], especialmente en pacientes tratados con corticosteroides, o en caso de alcoholismo, inmunosupresión grave y/o obesidad.
– Oftalmológicas: poco frecuentes (0,1-1,0%) [VISION BORROSA].
– Óticas: frecuentes (1-10%) [VERTIGO]; poco frecuentes (0,1-1,0%) [ALTERACIONES DEL EQUILIBRIO].
– Hematológicas: Poco frecuentes (0,1-1,0%) [NEUTROPENIA].
– Metabólicas: poco frecuentes (0,1-1,0%) [HIPERTRIGLICERIDEMIA], [HIPERCOLESTEROLEMIA], [HIPERGLUCEMIA], [HIPOFOSFATEMIA]. Se han descrito casos de [ACIDOSIS LACTICA] tras la utilización de análogos de nucleósidos o nucleótidos, especialmente en pacientes con esteatosis hepática, hepatitis, hepatomegalia u obesidad. De igual manera han aparecido casos de [LIPODISTROFIA], aunque se desconocen la significación clínica.
– Generales: frecuentes (1-10%) [ASTENIA], [FIEBRE]; poco frecuentes (0,1-1,0%) sensación como de ebriedad.
Sobredosis
Síntomas: En un paciente que accidentalmente ingirió 600 mg/12 horas de efavirenz durante dos días, sufrió síntomas neurológicos con mayor frecuencia. Otro paciente describió contracciones musculares involuntarias.
Tratamiento: En caso de sobredosis se procederá a disminuir la absorción con las medidas habituales (lavado gástrico, laxantes). El carbón activo podría ayudar a eliminar el efavirenz no absorbido.
Se recomienda vigilar estrechamente al paciente, instaurando un tratamiento sintomático.
El efavirenz se une fuertemente a proteínas, por lo que raramente se va a eliminar mediante diálisis. Por su parte, el 30% de la emtricitabina y el 10% del tenofovir se podrían eliminar mediante hemodiálisis. Se desconoce la eficacia de la diálisis peritoneal.
Fecha de aprobación/revisión de la ficha
Abril, 2008.