Eptacog alfa (activado)
Acción y mecanismo
El factor de coagulación VII activado, de origen recombinante, aumenta la formación de factores de la cuagulación IXa, Xa y trombina, debido a la activación directamente del factor X a Xa, necesario para la conversión de protrombina a trombina, factor que convierte el fibrinógeno en fibrina para formar el trombo. La actividad del factor VIIa aumenta considerablemente cuando forma un complejo con el factor tisular/fosfolípido, liberado localmente tras un daño de la pared vascular, aumentando sólamente la hemostasia local.
El eptacog alfa (activado) o factor de coagulación VIIa recombinante se clonó y expresó en células de rinón de crías de hámster (células BHK), es estructuralmente muy similar al factor VII activado derivado del plasma humano.
Farmacocinética
Vía (IV): Se administró en dosis únicas de 0.875, 1.75 y 3.5 KUI/kg tanto a pacientes sin episodios hemorrágicos como a pacientes con hemorragia, observándose un volumen aparente de distribución (Vd) de 0.106 l/kg (sin hemorragia) y 0.107 l/kg (con hemorragias). Su aclaramiento fue de 31 ml/h/kg (sin hemorragia) y 32.6 ml/h/kg (con hemorragia) y su semivida de eliminación de 2.89 h (sin hemorragia) y de 2.3 h (con hemorragia). La recuperación media “in vivo” en plasma fue 45.6% (sin hemorragia) y 43.5% (con hemorragia), lo que indica un consumo de factor VIIa en presencia de daño tisular.
Indicaciones
– [HEMORRAGIA]: episodios hemorrágicos e intervenciones quirúrgicas en pacientes con hemofilia heredada o adquirida con inhibidores a los factores de coagulación (Factor VII o Factor IX) > 10 UB o en pacientes con títulos de anticuerpos < 10 UB, que se espera que tengan una respuesta anamnéstica alta al Factor VIII o al Factor IX.
Posología
Vía iv:.22
Posología
Hemofilia A o B con inhibidores o pacientes que se espera que tengan una elevada respuesta
anamnésica.
Dosis: debe administrarse cuanto antes después de iniciarse un episodio hemorrágico. Se
recomienda una dosis inicial de 90 µg/kg administrada como inyección en bolo intravenoso.
Después de la dosis inicial puede ser necesario administrar inyecciones adicionales. La
duración del tratamiento y el intervalo entre inyecciones variará según la gravedad de la hemorragia, el
procedimiento invasivo o la intervención quirúrgica realizada.
Dosis en niños: La experiencia clínica actual no garantiza una diferenciación general en la dosificación entre niños y adultos, aunque los niños tienen una eliminación más rápida que los adultos. Por lo tanto, puede ser
necesario que en pacientes pediátricos las dosis de rFVIIa sean más altas, con el fin de alcanzar unas
concentraciones plasmáticas similares a las de los pacientes adultos (ver sección 5.2).
Intervalo de dosificación:
Inicialmente cada 2-3 horas hasta conseguir la hemostasia.
Si se precisa continuar el tratamiento, una vez conseguida la hemostasia eficaz el intervalo entre las dosis se puede aumentar sucesivamente a cada 4, 6, 8 ó 12 horas durante el período de tiempo que se considere que está indicado el tratamiento.
* Episodios hemorrágicos leves a moderados (incluyendo tratamiento en el domicilio): La administración precoz ha demostrado ser eficaz en el tratamiento de hemorragias articulares, musculares y mucocutáneas, de intensidad leve o moderada. Se recomiendan dos regímenes de dosificación:
1) Dos a tres inyecciones de 90 µg/kga intervalos de tres horas. Si se requiere un tratamiento posterior, se deberá administrar una dosis adicional de 90 µg/kg.
2) Una única inyección de 270 µg por kg de peso. La duración del tratamiento en el domicilio no debe superar las 24 horas.
* Episodios Hemorrágicos graves: dosis inicial de 90 µg/kg que se puede administrar en el camino hacia el hospital donde el paciente es tratado habitualmente. La dosificación posterior variará según el tipo y gravedad de la hemorragia. La frecuencia de la dosis debe ser, inicialmente, cada 2 horas hasta que se observe mejoría clínica. Si está indicado continuar la terapia, el intervalo entre las dosis se puede aumentar a 3 horas durante 1-2 días. A continuación, el intervalo entre las dosis se puede aumentar, sucesivamente, a cada 4, 6, 8 ó 12 horas durante el período que se considere que está indicado el tratamiento. Una hemorragia importante puede ser tratada durante 2-3 semanas pero se puede alargar más el tratamiento si está clínicamente justificado.
* Procedimiento invasivo / cirugía: dosis inicial de 90 µg/kg inmediatamente antes de la intervención. La dosis debe repetirse después de 2 horas y a continuación a intervalos de 2-3 horas durante las primeras 24-48 horas, dependiendo de la intervención practicada y del estado clínico del paciente. En cirugía mayor, se debe mantener la administración de la dosis a intervalos de 2-4 horas, durante 6-7 días. A continuación, se puede aumentar el intervalo de dosificación a 6-8 horas durante otras 2 semanas de tratamiento. Los pacientes sometidos a cirugía mayor pueden ser tratados durante 2-3 semanas, hasta que se haya producido cicatrización.
* Hemofilia adquirida: se debe administrar tan pronto como sea posible después del inicio de un episodio
hemorrágico. La dosis inicial, 90 µg/kg, administrada mediante inyección en bolo intravenoso.
Después de la dosis inicial, se pueden administrar otras inyecciones, si se necesitan. La
duración del tratamiento y el intervalo entre inyecciones variará según la gravedad de la hemorragia, el
carácter invasivo de los procedimientos o la cirugía a realizar.
El intervalo tras la dosis inicial debe ser de 2-3 horas, conseguido el control de la hemostasia, el intervalo de dosis se puede aumentar sucesivamente a cada 4, 6, 8 ó 12 horas durante tanto tiempo como se considere necesario.
* Deficiencia de Factor VII: Para el tratamiento de episodios hemorrágicos y para la prevención de hemorragias en pacientes sometidos a cirugía o procedimientos invasivos, se recomienda una dosis de 15-30 µg/kgcada 4-6 horas hasta conseguir un control de la hemostasia.
* Trombastenia de Glanzmann: Para el tratamiento de episodios hemorrágicos en pacientes que sufren cirugía o procedimientos invasivos, se recomienda una dosis de 90 µg (rango 80-120 µg)/kg a intervalos de 2 horas (1,5-2,5 horas). Deben administrarse por lo menos 3 dosis para asegurar una hemostasia eficaz. La vía de administración recomendada es en bolo intravenoso ya que puede darseuna falta de eficacia relacionada con la perfusión continua. Para aquéllos pacientes sin resistencia, las plaquetas es la primera línea de tratamiento en la trombastenia de Glanzmann.
– Normas para la correcta administración: Administrar como una inyección en bolo intravenoso a lo largo de 2-5 minutos. No se debe mezclar con soluciones para perfusión ni administrarlo en un goteo.
Contraindicaciones
– Contraindicado en pacientes alérgicos a las proteínas del ratón hámster o bovinas.
Advertencias/consejos
– Los requerimientos de dosificación deben basarse en la gravedad de la hemorragia y la respuesta clínica.
Después de la administración, se ha observado un acortamiento del tiempo de protrombina (TP) y del tiempo parcial de tromboplastina activado (aPTT), aunque no se ha demostrado ninguna correlación entre el PT y el aPTT y la eficacia clínica de este medicamento.
Interacciones
Este medicamento no debe administrarse junto a concentrado de complejo de protrombina, activados o no.
Reacciones adversas
Excepcionalmente (<<1%): erupciones cutáneas, prurito, náuseas, cefalea, malestar general, diaforesis, hipertensión o hipotensión. De un total de 8000 inyecciones se han notificado 7 casos de alteraciones graves, tales como: fallo renal, ataxia, alteraciones cerebrovasculares, angina de pecho, arritmia auricular o shock. Un paciente con déficit de factor VII desarrolló anticuerpos frente al Factor VII.