Fastum 50 mg 40 capsulas
Acción y mecanismo
– [ANTIINFLAMATORIO], analgésico y antipirético de tipo no esteroídico,del grupo de los ácidos arilpropiónicos, que actúa impidiendo la síntesis de prostaglandinas y otros prostanoides, mediante la inhibición competitiva y reversible de la ciclooxigenasa. Además, de la inhibición de la síntesis de prostaglandinas podría estabilizar la membrana de los lisosomas y antagonizar la acción de la bradiquinina. Se desconoce si esta acción contribuye a la eficacia de ketoprofeno en humanos.
Farmacocinética
– Absorción: Su biodisponibilidad es del 90%. Es absorbido rápidamente a través del tracto gastrointestinal (Tmax=0,5-2 h); formas retardadas (Tmax=6-7 h). La absorción oral es buena.
Los alimentos retrasan la absorción.
– Distribución: Su volumen aparente de distribución (Vd) es de 0,1 l/kg, siendo distribuido en el organismo de forma selectiva. Difunde a través de la barrera hematoencefálica, y llega al tejido sinovial. El grado de unión a proteínas plasmáticas es >98%.
– Metabolismo: Es metabolizado en el hígado, dando lugar a metabolitos sin actividad biológica significativa.
– Eliminación: es eliminado en un 60-70% en la orina en forma de metabolitos conjugados con ácido glucurónico. Su aclaramiento total es de 1,33 ml/min/kg y su semivida de eliminación es de 2 h; en las formas retardadas la semivida aumenta a 6-7 h; en ancianos también se ve incrementada.
Indicaciones
– [ARTRITIS REUMATOIDE].
– [ARTROSIS].
– [ESPONDILITIS ANQUILOSANTE].
– [GOTA]: episodios agudos de gota.
– [DOLOR] asociado a inflamación: dolor dental, traumatismos, dolor postquirúrgico odontológico, etc.
– [FIEBRE].
Posología
Adultos:.
– Vía oral: 50 mg/6-12 h; como pauta general se recomienda 50 mg/8 h, aumentando o disminuyendo la dosis según respuesta. Retard, 200 mg/24 h.
– Vía rectal: 100 mg/12-24 h.
– Vía im profunda: 50-100 mg/4 h si fuera necesario, hasta una dosis máxima de 200 mg en 24 h, durante 3 días como máximo, al cabo de los cuales la administración del medicamento se efectuará por vía oral y/o rectal. La forma inyectable está especialmente indicada en el tratamiento de ataque de los cuadros agudos con predominio del dolor.
Dosis máxima para cualquier vía: 200 mg/día.
– Nota: si se combinan varias formas de administración, no se deberán sobrepasar los 200 mg diarios.
– Normas para la correcta administración: Vía oral: administrar preferentemente junto con el alimento para paliar la posible irritación gástrica. Tomar los comprimidos enteros. Vía rectal: La administración de una única dosis se efectuará preferentemente por la noche; la administración de dos dosis se efectuará por la noche y por la mañana.
Contraindicaciones
– Hipersensibilidad conocida a ketoprofeno o [ALERGIA A AINES (ANTIINFLAMATORIOS NO ESTEROIDES)].
– Pacientes con antecedente de hipersensibilidad al ácido acetilsalicílico o a otros AINE, los cuales incluyen los pacientes que hayan experimentado crisis de asma, rinitis aguda, urticaria o edema angioneurótico tras haber utilizado ácido acetilsalicílico u otros AINE.
– [HEMORRAGIA DIGESTIVA], [HEMORRAGIA ESOFAGICA], [ULCERA PEPTICA] activa.
– Insuficiencia renal grave.
– Insuficiencia hepática grave.
– Vía rectal: hemorroides o proctitis.
Precauciones
– [ALTERACIONES DE LA COAGULACION], [DIATESIS HEMORRAGICA] o bajo tratamiento con anticoagulante: Los antiinflamatorios no esteroídicos, puede inhibir de forma pasajera y reversible la agregación plaquetaria. Los pacientes con problemas de hemostasia o los tratados con anticoagulantes deben ser cuidadosamente controlados. En pacientes sanos se ha observado prolongación de tiempo de hemorragia dentro de los límites de normalidad.
– Historial de úlcera gástrica, úlcera duodenal o intestinal, [ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL] ([COLITIS ULCEROSA] o con [ENFERMEDAD DE CROHN]): Con los antiinflamatorios no esteroídicos se han descrito hemorragias gastrointestinales o úlceras/perforaciones, raramente mortales, en cualquier momento durante el tratamiento, con o sin síntomas de aviso previo o antecedentes de acontecimientos gastrointestinales graves. Las hemorragias gastrointestinales o las úlceras/perforaciones tienen, en general, consecuencias más graves en los mayores de 60 años, los que utilicen dosis altas o durante tratamientos prolongados, así como los que toman anticoagulantes orales o glucocorticoides. Se aconseja vigilancia clínica en estos pacientes. Existen factores de riesgo que se asocian a la presencia úlcera gástrica inducida por AINE, como son la edad avanzada, antecedentes de úlcera péptica, intolerancia previa a AINE, consumo de tabaco, historia de alcoholismo y enfermedades graves concomitantes. El tratamiento deberá ser interrumpido si se produce hemorragia gastrointestinal o úlcera.
El consumo de AINES se ha relacionado con el desarrollo de brotes de la enfermedad inflamatoria intestinal, por lo que su uso en estos pacientes debe ser restringido y siempre controlado por el médico.
– [HIPERTENSION ARTERIAL], [INSUFICIENCIA CARDIACA], [EDEMA]: Los AINEs pueden inducir la retención de sodio, potasio y agua, así como interferir con los efectos natriuréticos de los diuréticos y, consecuentemente, pueden agravar el estado de los pacientes con insuficiencia cardiaca o hipertensión.
– [INSUFICIENCIA RENAL]: El efecto de los AINE sobre el riñón sano es prácticamente despreciable, sin embargo, en los pacientes que necesitan del efecto vasodilatador de las prostaglandinas para preservar su homeostasia renal (perfusión renal), como son aquellos que presentan un descenso del flujo sanguíneo renal y del volumen sanguíneo, la administración de antiinflamatorios inhibidores de la síntesis de prostaglandinas puede descompensar una insuficiencia renal latente. Este riesgo afecta especialmente a los ancianos, a pacientes con insuficiencia cardiaca congestiva, [CIRROSIS HEPATICA], [SINDROME NEFROTICO] o fallo renal así como a los pacientes con [DIABETES], los tratados con diuréticos, en [DESHIDRATACION] grave o que han sufrido una intervención quirúrgica importante responsable de un estado de [HIPOVOLEMIA]. En estos pacientes, es preciso controlar minuciosamente la diuresis y la función renal durante el tratamiento.
– [MENINGITIS ASEPTICA], [LUPUS ERITEMATOSO SISTEMICO]: en raras ocasiones se ha observado meningitis aséptica en pacientes tratados con AINE. La meningitis parece consecuencia de una reacción de hipersensibilidad, si bien no se ha encontrado alergia cruzada entre AINE. Ha sido más frecuente en pacientes con lupus eritematoso sistémico y otras enfermedades del colágeno, aunque también ha sido notificada en algunos pacientes que no padecían estas patologías En muchos acaso los síntomas meníngeos se han manifestado al reiniciar el tratamiento después de un periodo de descanso. En pacientes tratados con AINE que desarrollen síntomas de meningitis, considerar la posibilidad de meningitis aséptica.
– [ASMA]: los pacientes asmáticos son más propensos que otros pacientes a desarrollar reacciones de hipersensibilidad al ácido acetilsalicílico y a otros AINES.
Advertencias/consejos
CONSEJOS AL PACIENTE:
– Se recomienda tomar el medicamento con las comidas o leche, para reducir las posibles molestias de estómago.
– El paciente debe informar a su médico en caso experimentar erupciones cutáneas, síntomas que pudieran estar relacionados con una úlcera gastroduodenal (tales como dolor epigástrico o heces oscuras), alteraciones visuales, aumento de peso, edema o dolor de cabeza prolongado.
– El paciente debe notificarle al médico si ha tenido alguna reacción asmática mientras tomaba este medicamento.
– Se debe evitar la administración prolongada de este medicamento sin el expreso consentimiento del médico.
CONSIDERACIONES ESPECIALES:
– Durante tratamientos prolongados deben vigilarse posibles signos y síntomas de ulceración o hemorragia. Las lesiones pueden aparecer en cualquier momento durante el tratamiento, con o sin síntomas de previo aviso o antecedentes de acontecimientos gastrointestinales graves. También se deben buscar antecedentes de esofagitis, gastritis y/o úlcera péptica para asegurarse de su curación total antes de iniciar el tratamiento con un AINE.
– El empleo de antiinflamatorios no esteroídicos puede producir elevaciones de uno o más enzimas hepáticos. Durante el tratamiento prolongado debería controlarse la función hepática. Si las enzimas aumentan progresivamente o hay signos o síntomas de enfermedad hepática, se debería suspender inmediatamente el tratamiento.
– En los ancianos diabéticos se deberían realizar controles periódicos de creatinina sérica.
– Se recomienda monitorizar la presión arterial de todos los pacientes que tomen AINE junto a diuréticos, beta-bloqueantes o IECA.
– Vigilar posibles signos de retención hidrosalina (ej: formación de edemas), especialmente en pacientes con hipertensión o insuficiencia cardiaca.
– En el caso de que en pacientes tratados con este medicamento se produzcan molestias oculares (edema palpebral, visión borrosa e irritación ocular) se recomienda su valoración por un oftalmólogo.
– Si la respuesta clínica no es la adecuada, no se debe exceder la dosis máxima diaria recomendada (1200 mg/día) ni se debe añadir otro AINE al tratamiento, ya que se incrementa la toxicidad, sin efecto terapéutico añadido.
– Los AINE pueden enmascarar síntomas de una enfermedad infecciosa subyacente.
– Algunos inhibidores de la síntesis de prostaglandinas administrados durante periodos prolongados pueden afectar la fertilidad, esta revierte al suspender el tratamiento. En mujeres con dificultades para concebir o sometidas a pruebas de infertilidad, debería valorarse la utilización de AINE.
– Se han observado reacciones de fotosensibilidad en algunos pacientes tratados con antiinflamatorios. Se aconseja tomar medidas de protección solar hasta que se determine la tolerancia a la luz solar.
– Los antiinflamatorios administrados en embarazo a término pueden retrasar el parto.
– En pacientes con elevado riesgo de úlceras inducidas por AINES debe considerarse la administración preventiva de inhibidores de la bomba de protones, antihistamínicos H2 o misoprostol.
– La asociación de antiinflamatorios con dosis bajas de aspirina incrementa el riesgo de alteraciones gastrointestinales. La administración conjunta sólo debe hacerse siempre bajo control clínico.
Interacciones
– AINE, incluyendo dosis antiagregantes de ácido acetilsalicílico. Aumenta el riesgo de úlcera péptica y hemorragia gástrica.
– Anticoagulantes orales. Puede potenciar la acción de los anticoagulantes orales por desplazamiento de los mismos de su unión a proteínas plasmáticas. En enfermos bajo tratamiento con anticoagulantes, la dosis de anticoagulante debe ser reajustada durante la terapia conjunta, y la actividad de protrombina será vigilada periódicamente.
– Diuréticos. El ketoprofeno podría oponerse a los efectos antihipertensivos de los diuréticos. De igual forma, podría potenciarse la nefrotoxicidad por AINE.
– Hidantoínas. Debe evitarse su uso con hidantoínas de acción prolongada, ya que puede potenciar sus efectos tóxicos.
– Metotrexato. Los antiinflamatorios no esteroideos desplazan al metotrexato de su unión a proteínas plasmáticas y reducen su secreción tubular en experimentación animal, por tanto, pueden aumentar la toxicidad del metotrexato y su empleo conjunto debe ser monitorizado cuidadosamente.
– Sulfonamidas. Debe evitarse su uso con sulfonamidas de acción prolongada, ya que puede potenciar sus efectos tóxicos.
Embarazo
Categoría B de la FDA, en el 3º trimestre categoría D de la FDA. Los estudios en animales no han registrado efectos teratógenos, aunque sí embriotóxicos. No existen estudios adecuados y bien controlados en humanos. No parece que el uso ocasional de AINEs, salvo poco antes del parto, produzca efectos adversos fetales. No obstante, con el uso crónico durante el 3º trimestre, podrían producir teóricamente cierre prematuro del ductus arterioso del feto, por inhibición de la síntesis de prostaglandinas. También pueden producir efecto antiagregante plaquetario, que podría complicar o prolongar la hemorragia materna y predisponer al recién nacido. Antes del parto, pueden reducir e incluso anular la contractilidad uterina, retrasando el parto y prolongando la gestación. El uso de estos fármacos, especialmente durante el tercer trimestre, sólo se acepta en caso de ausencia de alternativas terapéuticas más seguras.
Lactancia
Se desconoce si el ketoprofeno se excreta en leche materna, aunque se ha detectado en leche de perros en concentraciones del 4-5% de las séricas maternas. Uso generalmente aceptado en madres lactantes, aunque se recomienda vigilancia del recién nacido.
Niños
El ketoprofeno se ha usado con éxito como tratamiento de la artritis reumatoide en casos aislados de niños de 2-16 años de edad. La seguridad y eficacia en niños mayores de 6 meses se ha establecido para el alivio sintomático de la fiebre, por lo que se acepta el uso de ketoprofeno (en la forma farmacéutica específica) para el alivio sintomático de la fiebre en niños a partir de 6 meses.
Ancianos
En ancianos se alcanzan niveles séricos mayores, con aumento de la semivida de eliminación (probablemente por efecto combinado de hipoalbuminemia, insuficiencia renal y hepática), por lo que puede ser recomendable utilizar dosis menores. Además los ancianos parecen ser más susceptibles a los efectos adversos de los AINEs. El riesgo de padecer enfermedad ulcerosa grave esta incrementado en mayores de 65 años, y parece ser dosis-dependiente. También pueden causar retención de líquidos, pudiendo producir complicaciones cardiovasculares y reducción de la eficacia de los tratamientos antihipertensivos. Se recomienda precaución en su uso e iniciar la terapia con dosis menores.
Reacciones adversas
Las reacciones adversas notificadas como al menos posiblemente relacionadas con la administración de dexketoprofeno trometamol en los ensayos clínicos se tabulan a continuación, clasificadas por órganos y sistemas y ordenados según frecuencia:
– Alteraciones de la sangre y sistema linfático: poco frecuentes (0,1-1%): [ANEMIA]; muy raras / casos aislados (<0,01%): [NEUTROPENIA], [TROMBOPENIA].
– Alteraciones del metabolismo y nutrición: raras (0,01-0,1%): [HIPERGLUCEMIA], [HIPOGLUCEMIA], [HIPERTRIGLICERIDEMIA].
– Alteraciones del sistema nervioso: (0,1-1%): [CEFALEA], [MAREO], [INSOMNIO], [SOMNOLENCIA]; (0,01-0,1%): [PARESTESIA].
– Alteraciones oculares: (0,1-1%): [VISION BORROSA].
– Alteraciones del oído y laberinto: (0,01-0,1%): [TINNITUS].
– Alteraciones cardíacas: (0,01-0,1%): [EXTRASISTOLE], [TAQUICARDIA].
– Alteraciones vasculares: poco frecuentes (0,1-1%): [HIPOTENSION], [SOFOCOS]; (0,01-0,1%): [HIPERTENSION ARTERIAL], [EDEMA MALEOLAR], [TROMBOFLEBITIS] superficial.
– Alteraciones respiratorias, torácicas y mediastínicos: (0,01-0,1%): bradipnea ([INSUFICIENCIA RESPIRATORIA]); muy raras / casos aislados (<0,01%): [ESPASMO BRONQUIAL], [DISNEA].
– Alteraciones gastrointestinales: (1-10%): [NAUSEAS], [VOMITOS]; (0,1-1%): [DOLOR ABDOMINAL], [DISPEPSIA], [DIARREA], [ESTREÑIMIENTO], [HEMATEMESIS], [SEQUEDAD DE BOCA]; (0,01-0,1%): [ULCERA PEPTICA], [HEMORRAGIA DIGESTIVA] o [PERFORACION INTESTINAL], [ANOREXIA]; muy raras / casos aislados (<0,01%): [PANCREATITIS].
– Alteraciones hepatobiliares: (0,01-0,1%): La hepatotoxicidad inducida por AINE es rara y generalmente leve; habitualmente se manifiesta como [INCREMENTO DE LOS VALORES DE TRANSAMINASAS]leve y transitoria. Muy raramente se manifiesta como anorexia, astenia, náuseas e [ICTERICIA]; (<0,01%): [HEPATITIS].
– Alteraciones de la piel y tejido subcutáneo: (0,1-1%): [DERMATITIS], [PRURITO], [ERUPCIONES EXANTEMATICAS] cutáneo, [EXCESO DE SUDORACION]; (0,01-0,1%): [URTICARIA], [ACNE]; muy raras / casos aislados (<0,01%): reacciones mucocutáneas graves ([SINDROME DE STEVENS-JOHNSON], [NECROLISIS EPIDERMICA TOXICA]), [ANGIOEDEMA], [REACCIONES DE FOTOSENSIBILIDAD].
– Alteraciones musculo-esqueléticas, del tejido conectivo y óseas: (0,01-0,1%): [RIGIDEZ MUSCULAR], [RIGIDEZ ARTICULAR], [CALAMBRES MUSCULARES].
– Alteraciones renales y urinarias: Puede [INCREMENTO DE LOS VALORES DE NITROGENO UREICO] e [INCREMENTO DE LOS VALORES DE CREATININA SERICA]. En casos excepcionales, los AINEs pueden ser responsables de [INSUFICIENCIA RENAL AGUDA], [NEFRITIS INTERSTICIAL], [GLOMERULONEFRITIS], [NECROSIS MEDULAR RENAL] o [SINDROME NEFROTICO], [PROTEINURIA], [HIPERPOTASEMIA], [HIPONATREMIA], [POLIURIA] y edema. Se ha observado en pacientes susceptibles que toman altas dosis de AINE durante periodos prolongados de tiempo. Son pacientes de riesgo los que tienen insuficiencia cardiaca, renal o hepática, ascitis, hiperreninemia, hiperaldosteronemia, shock, sepsis, lupus eritematoso sistémico, deshidratación, los tratados con IECA o con diuréticos y los ancianos.
– Alteraciones del sistema reproductor: (0,01-0,1%): [TRASTORNOS DEL CICLO MENSTRUAL], alteraciones prostáticas.
– Alteraciones generales y del lugar de administración: (1-10%): [DOLOR EN EL PUNTO DE INYECCION]; (0,1-1%): reacciones, inflamación, escozor o hemorragia en el lugar de inyección, [GOLPE DE CALOR], [ASTENIA], [DOLOR], [ESCALOFRIOS]; raras (0,01-0,1%): [LUMBALGIA], [SINCOPE], [ESCALOFRIOS]; muy raras / casos aislados (<0,01%): [ANAFILAXIA], [EDEMA].
– Investigaciones (ensayos de laboratorio): raras (0,01-0,1%): [CETONURIA], [PROTEINURIA].
Las siguientes reacciones adversas podrían presentarse ya que se han observado para otros antiinflamatorios no esteroideos y pueden estar asociadas a los inhibidores de la síntesis de las prostaglandinas: [MENINGITIS ASEPTICA], la cual predominantemente podría ocurrir en pacientes con lupus eritematoso sistémico o enfermedad mixta del tejido conectivo, y reacciones hematológicas ([PURPURA], [ANEMIA APLASICA] y [ANEMIA HEMOLITICA], raramente [AGRANULOCITOSIS] e [DEPRESION MEDULAR]).
Sobredosis
Se desconoce la sintomatología por sobredosificación. Fármacos similares han producido alteraciones gastrointestinales y neurológicas (somnolencia, vértigo, desorientación).
Tratamiento de la intoxicación: Vaciado de estómago, administración de carbon adsorbente (puede ser efectivo si se administra antes de las dos horas de la intoxicación), vigilancia y mantenimiento de constantes vitales, tratamiento sintomático de irritación gástrointestinal, hipotensión, depresión respiratoria y convulsiones, con monitorización de funciones renal y hepática y detección en heces de posible hemorragia gastrointestinal.