Rebif 22 mcg 1 jer prec
Acción y mecanismo
El interferón beta-1a es, al igual que otros interferones, una citoquina que media actividades antivíricas, antiproliferativas e inmunomoduladoras. Se produce en varios tipos de células incluyendo fibroblastos y macrófagos. Al no estar bién descrita la fisiopatología de la esclerosis múltiple, se desconoce exactamente el mecanismo de acción en esta enfermedad. Se ha demostrado que a las dosis aconsejadas, el interferon beta-1a disminuye la incidencia (aprox. un 30% en 2 años) y la gravedad de los brotes clínicos.
Farmacocinética
– Absorción: Tras la administración sc de una dosis única de 60 mcg, se obtiene una Cmáx de 6-10 ui/ml a las 3
horas. El pico de los niveles de actividad antivírica sérica ocurre entre 1-8 h.
– Metabolismo: hepático.
– Excreción: renal. Semivida de eliminación de 5 h, detectándose niveles séricos 12-24 h tras la inyección.
Indicaciones
– [ESCLEROSIS MULTIPLE]: Tratamiento de pacientes con esclerosis múltiple y con 2 o más brotes durante de los dos últimos años. No se ha demostrado su eficacia en aquellos pacientes con esclerosis múltiple secundaria progresiva que ya no presenten actividad de brotes.
Posología
Adultos, vía sc: 44 mcg 3 veces por semana. Para pacientes que no toleren esta la dosis, administrar 22 mcg (0,5 ml), 3 veces por semana.
Inicialmente para lograr que aparezca taquifilaxia y que así disminuyan los efectos adversos, se aconseja administrar 8,8 mcg, 0,1 ml de la concentración de 44 mcg ó 0.2 ml de la concentración de 22 mcg) durante las 2 primeras semanas, un 50% de la dosis (22 mcg, 0,25 ml de la concentración de 44 mcg o el total de la concentración de 22 mcg) en las semanas 3 y 4, y a partir de de aquí la dosis completa. En la actualidad se desconoce la duración óptima del tratamiento. No ha sido evaluada la seguridad y eficacia de tratamientos superiores a 4 años.
– Normas para la correcta administración: vía subcutánea, alternando las zonas de inyección cada dosis, para evitar el riesgo de necrosis en la zona de inyección.
– Conservación: 2º-8º C. No congelar.
Contraindicaciones
– Pacientes con historial de hipersensibilidad al interferón beta recombinante o natural, a la albúmina sérica humana o a cualquier otro componente de la especialidad.
– Paciente con [EPILEPSIA] e historial de crisis no controladas adecuadamente con el tratamiento.
– Pacientes con [DEPRESION] o [TENDENCIAS SUICIDAS]
Precauciones
– [DEPRESION] y/o [TENDENCIAS SUICIDAS]: hay una mayor incidencia de depresión y/o ideas suicidas en pacientes con esclerosis múltiple tratados con interferón.
– Antecedentes de crisis epilépticas: Para los pacientes sin historial previo de crisis epilépticas y que desarrollen dichas crisis con el tratamiento de interferón beta-1a, se deberá establecer una base etiológica e instaurar una terapia anticonvulsiva adecuada antes de reanudar el tratamiento.
– [CARDIOPATIA] ([INSUFICIENCIA CARDIACA] o [INSUFICIENCIA CORONARIA], [ANGINA DE PECHO] o [ARRITMIA CARDIACA]): los síntomas de síndrome pseudogripal pueden ser estresantes en estos pacientes, con riesgo de agravamiento de la enfermedad.
– Extremar la vigilancia en [INSUFICIENCIA HEPATICA] o [INSUFICIENCIA RENAL] grave y en [DEPRESION MEDULAR] grave.
– Síndrome pseudogripal: Es el efecto adverso más frecuente. Suelen ser más inteso al comienzo del tratamiento, para disminuir en intensidad y frecuencia a medida que éste progresa.
– Monitorización: El uso de interferón se asocia con alteraciones de pruebas de laboratorio. Por lo tanto, además de las pruebas de laboratorio habituales que se realizan a los pacientes con esclerosis múltiple, se recomienda llevar a cabo recuento leucocitario completo y diferencial, recuento de plaquetas y bioquímica sanguínea incluyendo pruebas de función hepática durante el tratamiento. Los pacientes con mielosupresión pueden necesitar una monitorización más estrecha.
Se pueden desarrollar anticuerpos neutralizantes séricos frente a interferón beta-1a. La tasa exacta de incidencia de formación de anticuerpos es todavía incierta. Los datos iniciales sugieren que después de 24-48 meses de tratamiento, aproximadamente el 24% de los pacientes desarrollan anticuerpos séricos frente a interferón beta-1a. Los datos sugieren que en algunos pacientes el desarrollo de anticuerpos está asociado con una reducción de eficacia clínica.
Advertencias/consejos
Antes de iniciar el tratamiento, los pacientes deben ser informados de que pueden padecer un síndrome pseudogripal, más frecuente e intenso al comienzo del tratamiento, así como alteraciones depresivas y tendencias suicidas; los pacientes propensos a estas alteraciones deben ser vigilados estrechamente, para implantarles terapia antidepresiva.
Interacciones
No se han realizado estudios convencionales de interacciónes de interferón beta-1a en humanos.
La experiencia clínica indica que los pacientes con esclerosis múltiple pueden recibir tratamiento con interferón beta-1a y corticoides o tratamiento con ACTH durante las recaídas.
Los interferones reducen la actividad de los enzimas dependientes del citocromo P450 hepático en humanos y animales.
Se debe extremar la precaución cuando se administra conjuntamente con otros principios activos de estrecho margen terapéutico y que dependan para su metabolismo del sistema citocromo P450 (antiepilépticos, antidepresivos).
Embarazo
Categoría C de la FDA. Los estudios sobre monos rhesus, utilizando dosis elevadas, han registrado actividad abortiva. No hay estudios adecuados y bien controlados en mujeres embarazadas. El uso de este medicamento sólo se acepta en caso de ausencia de alternativas terapéuticas más seguras. Se recomienda a las mujeres en edad fértil la utilización de método anticonceptivo adecuado, así como excluir el embarazo antes de iniciar el tratamiento. También se recomienda advertir del riesgo potencial del feto en caso de que la paciente use el fármaco durante el embarazo o se quede embarazada durante su uso.
Lactancia
Se ignora si el interferón beta-1A es excretado con la leche materna. A causa de la posibilidad de graves efectos adversos en los lactantes, se recomienda suspender la lactancia materna o evitar la administración de este medicamento.
Niños
La seguridad y eficacia del uso de interferón beta-1A en niños no han sido establecidas. Uso no recomendado.
Ancianos
Los pacientes geriátricos pueden ser más susceptibles a sufrir efectos adversos, en especial cardiovasculares o relativos al SNC. Se recomienda especial precaución.
Reacciones adversas
Los efectos adversos de interferon beta-1a son, en general, frecuentes y moderadamente importantes. El 100% de los pacientes experimenta algún tipo de efecto adverso. Alrededor del 10% de los pacientes tratados con este medicamento se ven obligados a suspender el tratamiento. Las reacciones adversas más comunes son un cuadro con síntomas gripales (95-100%): fiebre (40-95%) de 38-40ºC en las 6 horas después de la administración; cefalea (20-70%), fatiga (50-95%), mialgia (30-75%), artralgia (5-25%), escalofríos (40-65%), taquicardia, anorexia, sequedad de boca y disgeusia.
Descripción e incidencia de reacciones adversas, por grupos anatómicos:
-Alérgicas/Dermatológicas: Frecuentemente: erupción exantemática y alopecia pasajera (25%), dolor y reacción en el punto de inyección (10-20%). Ocasionalmente: sequedad de piel y dermatitis (5-12%), sudoración (8%).
-Cardiovasculares: Ocasionalmente (1-9%): edema y edema facial, hipotensión, sofocos, dolor anginoso. Raramente (<1%): hipotensión ortostática, bradicardia, insuficiencia cardiaca, colapso.
-Digestivas: Frecuentemente: anorexia (20-65%), náuseas (15-50%), vómitos (5-50%), diarrea (20-45%), disgeusia (15-25%), dolor abdominal (5-20%), sequedad de boca (25%), gingivitis (14%). Ocasionalmente (1-9%): estomatitis, estreñimiento y flatulencia.
-Endocrinas: Ocasionalmente (1-9%): hipotiroidismo o hipertiroidismo, hiperprolactinemia, ginecomastia.
-Genitourinarias: Frecuentemente (10-20%): proteinuria, incremento de los valores de creatinina sérica, incremento de los valores de nitrógeno uréico en sangre. Raramente (<1%): insuficiencia renal aguda y síndrome nefrótico acompañado de nefritis intersticial.
-Hepatobiliares: Muy frecuentemente: incremento de los valores de transaminasas (10-80%, dosis-dependiente). Frecuentemente (10-25%): incremento de los valores de lactato deshidrogenasa, incremento de los valores de fosfatasa alcalina, hiperbilirrubinemia.
-Metabólicas: Raramente (<1%): hipertrigliceridemia; hiponatremia probablemente secundaria a un síndrome de secreción inapropiada de hormona antidiurética, hipercalciuria.
-Neurológicas: Muy frecuentemente: cefalea (10-50%), mareos (10-40%), parestesias (20%). Raramente (<1%): encefalopatía, isquemia cerebral transitoria, convulsiones.
-Oculares: Ocasionalmente (1-9%): visión borrosa. Raramente (<1%): conjuntivitis, fotofobia.
-Osteomusculares: Muy frecuentemente: mialgia (70%) y artralgia (24%) habitualmente asociados con síntomas gripales. Frecuentemente: dolor óseo (20%). Ocasionalmente (1-5%): calambres musculares, lumbalgia.
-Otorrinolaringológicas: Ocasionalmente (1-9%): congestión nasal, rinitis, rinorrea, sordera, otalgia, tinnitus, epistaxis.
-Psicológicas/Psiquiátricas: Muy frecuentemente (>25%): astenia (95%), malestar general (20-70%), depresión. Frecuentemente (10-15%): amnesia, confusión. Ocasionalmente (1-9%): somnolencia, insomnio, ansiedad. Raramente (<1%): psicosis, tendencias suicidas, paranoia.
-Respiratorias: Muy frecuentemente (>25%): disnea, tos y sequedad de la orofaringe. Raramente (<1%): infiltrado pulmonar, pneumonitis, taquipnea.
-Sanguíneas: Muy frecuentemente: leucopenia (principalmente neutropenia) que puede aparecer a las pocas horas de la adninistración (1-65%); anemia (5-70%) que se recupera en pocas semanas o meses; trombocitopenia (1-40%); hemoglobina disminuida (65%) con tratamientos prolongados.
-Sexuales: Ocasionalmente (1-9%): impotencia sexual y reducción de la líbido (6%).
El tratamiento debe ser suspendido inmediatamente en el caso de que el paciente experimente signos de infiltrado pulmonar o algún episodio de leucopenia y/o trombocitopenia, después de haberlo notificado al médico; los efectos hematológicos se recuperaran rápidamente al cabo de unos días.