Tenoxicam
Acción y mecanismo
Antiinflamatorio no esteroídico (AINE) del grupo de los oxicams, que actúa impidiendo la síntesis de prostaglandinas, mediante la inhibición de la actividad ciclooxigenasa, enzima que convierte el ácido araquidónico en prostaglandinas.
Presenta la misma eficacia y potencia antiinflamatoria y analgésica que el piroxicam, el diclofenaco, el naproxeno o la indometacina. Presenta también propiedades inhibidoras de la agregación plaquetaria y antipiréticas aunque no es eficaz como antitérmico.
Además, el tenoxicam, es un potente inhibidor “in vitro” de las metaloproteinasas humanas, estromelisina y colagenasa, inductoras de la degradación del cartílago.
Farmacocinética
– Absorción: tras su administración oral, se absorbe rápida y completamente (biodisponibilidad absoluta del 100%). La Cmáx en ayunas se alcanza en el espacio de 2 h.
Los alimentos retrasan ligeramente la absorción, pero no reducen la cantidad total absorbida.
– Distribución: elevada fijación proteica (99%). Volumen medio de distribución de 10-12 l. La penetración del tenoxicam en el líquido sinovial es buena (40-50% de la concentración plasmática). A dosis de 20 mg/día, el estado de equilibrio se alcanza en el plazo de 10 -15 días.
Con una dosis única diaria el 0,2% del tenoxicam administrado, se excreta con la leche materna.
– Metabolismo: se metaboliza completamente en el hígado, dando lugar a metabolitos inactivos.
– Eliminación: semivida de eliminación plasmática es muy larga (promedio de 72 horas; límites 42 y 98 horas). Dos tercios de la dosis se excretan con la orina (principalmente en forma de metabolito inactivo 5-hidroxi-tenoxicam) y el resto con la bilis (una proporción importante en forma de glucurónidos). El aclaramiento plasmático total es de 2 ml/min.
Indicaciones
– Reumatismo inflamatorio crónico como [ARTRITIS REUMATOIDE], [ARTROSIS], [ESPONDILITIS ANQUILOSANTE] y afecciones relacionadas. ciertas [ARTROSIS] dolorosas e invalidantes
– Tratamiento de cuadros agudos de afecciones reumáticas periarticulares: [TENDINITIS], [BURSITIS], periartritis de hombro o cadera, [SINDROME DE HOMBRO-MANO], distorsiones, distensiones).
– [DISMENORREA PRIMARIA].
Posología
– Adultos, vía oral:
* Para todas las indicaciones excepto dismenorrea primaria: 20 mg/24 h. En los trastornos crónicos suele utilizarse una dosis de mantenimiento de 10mg/24h.
* Dismenorrea primaria: 20-40 mg/día.
– Niños: no se ha establecido su seguridad y eficacia. Uso no recomendado.
– Ancianos: Dosis similares al adulto, aunque se aconseja vigilancia clínica.
– Insuficiencia renal: No es necesario ajustar la dosis, aunque se aconseja vigilancia clínica. No se aconseja en insuficiencia renal grave.
– Insuficiencia hepática: No es necesario ajustar la dosis, aunque se aconseja vigilancia clínica. No se aconseja en insuficiencia hepática grave.
– Normas para la correcta administración: Los comprimidos han de tomarse con un vaso de agua y el contenido de los sobres debe disolverse en un vaso de agua fría inmediatamente antes de la toma.
Contraindicaciones
– Hipersensibilidad conocida a tenoxicam o diclofenaco o [ALERGIA A OXICAMAS].
– Pacientes con antecedente de hipersensibilidad al ácido acetilsalicílico o a otros AINE, los cuales incluyen los pacientes que hayan experimentado crisis de asma, rinitis aguda, urticaria o edema angioneurótico tras haber utilizado ácido acetilsalicílico u otros AINE.
– [HEMORRAGIA DIGESTIVA], [HEMORRAGIA ESOFAGICA], [ULCERA PEPTICA] activa, [HEMORRAGIA CEREBRAL].
– Insuficiencia renal grave.
– Insuficiencia hepática grave.
Precauciones
– [ALTERACIONES DE LA COAGULACION], [DIATESIS HEMORRAGICA] o bajo tratamiento con anticoagulante: Los antiinflamatorios no esteroídicos, puede inhibir de forma pasajera y reversible la agregación plaquetaria. Los pacientes con problemas de hemostasia o los tratados con anticoagulantes deben ser cuidadosamente controlados. En pacientes sanos se ha observado prolongación de tiempo de hemorragia dentro de los límites de normalidad.
– Historial de úlcera gástrica, úlcera duodenal o intestinal, [ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL] ([COLITIS ULCEROSA] o con [ENFERMEDAD DE CROHN]): Con los antiinflamatorios no esteroídicos se han descrito hemorragias gastrointestinales o úlceras/perforaciones, raramente mortales, en cualquier momento durante el tratamiento, con o sin síntomas de aviso previo o antecedentes de acontecimientos gastrointestinales graves. Las hemorragias gastrointestinales o las úlceras/perforaciones tienen, en general, consecuencias más graves en los mayores de 60 años, los que utilicen dosis altas o durante tratamientos prolongados, así como los que toman anticoagulantes orales o glucocorticoides. Se aconseja vigilancia clínica en estos pacientes. Existen factores de riesgo que se asocian a la presencia úlcera gástrica inducida por AINE, como son la edad avanzada, antecedentes de úlcera péptica, intolerancia previa a AINE, consumo de tabaco, historia de alcoholismo y enfermedades graves concomitantes. El tratamiento deberá ser interrumpido si se produce hemorragia gastrointestinal o úlcera.
El consumo de AINES se ha relacionado con el desarrollo de brotes de la enfermedad inflamatoria intestinal, por lo que su uso en estos pacientes debe ser restringido y siempre controlado por el médico.
– [HIPERTENSION ARTERIAL], [INSUFICIENCIA CARDIACA], [EDEMA]: Los AINEs pueden inducir la retención de sodio, potasio y agua, así como interferir con los efectos natriuréticos de los diuréticos y, consecuentemente, pueden agravar el estado de los pacientes con insuficiencia cardiaca o hipertensión.
– [INSUFICIENCIA RENAL]: El efecto de los AINE sobre el riñón sano es prácticamente despreciable, sin embargo, en los pacientes que necesitan del efecto vasodilatador de las prostaglandinas para preservar su homeostasia renal (perfusión renal), como son aquellos que presentan un descenso del flujo sanguíneo renal y del volumen sanguíneo, la administración de antiinflamatorios inhibidores de la síntesis de prostaglandinas puede descompensar una insuficiencia renal latente. Este riesgo afecta especialmente a los ancianos, a pacientes con insuficiencia cardiaca congestiva, [CIRROSIS HEPATICA], [SINDROME NEFROTICO] o fallo renal así como a los pacientes con [DIABETES], los tratados con diuréticos, en [DESHIDRATACION] grave o que han sufrido una intervención quirúrgica importante responsable de un estado de [HIPOVOLEMIA]. En estos pacientes, es preciso controlar minuciosamente la diuresis y la función renal durante el tratamiento.
– [MENINGITIS ASEPTICA], [LUPUS ERITEMATOSO SISTEMICO]: en raras ocasiones se ha observado meningitis aséptica en pacientes tratados con AINE. La meningitis parece consecuencia de una reacción de hipersensibilidad, si bien no se ha encontrado alergia cruzada entre AINE. Ha sido más frecuente en pacientes con lupus eritematoso sistémico y otras enfermedades del colágeno, aunque también ha sido notificada en algunos pacientes que no padecían estas patologías En muchos acaso los síntomas meníngeos se han manifestado al reiniciar el tratamiento después de un periodo de descanso. En pacientes tratados con AINE que desarrollen síntomas de meningitis, considerar la posibilidad de meningitis aséptica.
– [ASMA]: los pacientes asmáticos son más propensos que otros pacientes a desarrollar reacciones de hipersensibilidad al ácido acetilsalicílico y a otros AINES.
Advertencias/consejos
CONSEJOS AL PACIENTE:
– Se recomienda tomar el medicamento con las comidas o leche, para reducir las posibles molestias de estómago.
– El paciente debe informar a su médico en caso experimentar erupciones cutáneas, síntomas que pudieran estar relacionados con una úlcera gastroduodenal (tales como dolor epigástrico o heces oscuras), alteraciones visuales, aumento de peso, edema o dolor de cabeza prolongado.
– El paciente debe notificarle al médico si ha tenido alguna reacción asmática mientras tomaba este medicamento.
– Se debe evitar la administración prolongada de este medicamento sin el expreso consentimiento del médico.
CONSIDERACIONES ESPECIALES:
– Durante tratamientos prolongados deben vigilarse posibles signos y síntomas de ulceración o hemorragia. Las lesiones pueden aparecer en cualquier momento durante el tratamiento, con o sin síntomas de previo aviso o antecedentes de acontecimientos gastrointestinales graves. También se deben buscar antecedentes de esofagitis, gastritis y/o úlcera péptica para asegurarse de su curación total antes de iniciar el tratamiento con un AINE.
– El empleo de antiinflamatorios no esteroídicos puede producir elevaciones de uno o más enzimas hepáticos. Durante el tratamiento prolongado debería controlarse la función hepática. Si las enzimas aumentan progresivamente o hay signos o síntomas de enfermedad hepática, se debería suspender inmediatamente el tratamiento.
– En los ancianos diabéticos se deberían realizar controles periódicos de creatinina sérica.
– Se recomienda monitorizar la presión arterial de todos los pacientes que tomen AINE junto a diuréticos, beta-bloqueantes o IECA.
– Vigilar posibles signos de retención hidrosalina (ej: formación de edemas), especialmente en pacientes con hipertensión o insuficiencia cardiaca.
– En el caso de que en pacientes tratados con este medicamento se produzcan molestias oculares (edema palpebral, visión borrosa e irritación ocular) se recomienda su valoración por un oftalmólogo.
– Si la respuesta clínica no es la adecuada, no se debe exceder la dosis máxima diaria recomendada (1200 mg/día) ni se debe añadir otro AINE al tratamiento, ya que se incrementa la toxicidad, sin efecto terapéutico añadido.
– Los AINE pueden enmascarar síntomas de una enfermedad infecciosa subyacente.
– Algunos inhibidores de la síntesis de prostaglandinas administrados durante periodos prolongados pueden afectar la fertilidad, esta revierte al suspender el tratamiento. En mujeres con dificultades para concebir o sometidas a pruebas de infertilidad, debería valorarse la utilización de AINE.
– Se han observado reacciones de fotosensibilidad en algunos pacientes tratados con antiinflamatorios. Se aconseja tomar medidas de protección solar hasta que se determine la tolerancia a la luz solar.
– Los antiinflamatorios administrados en embarazo a término pueden retrasar el parto.
– En pacientes con elevado riesgo de úlceras inducidas por AINES debe considerarse la administración preventiva de inhibidores de la bomba de protones, antihistamínicos H2 o misoprostol.
– La asociación de antiinflamatorios con dosis bajas de aspirina incrementa el riesgo de alteraciones gastrointestinales. La administración conjunta sólo debe hacerse siempre bajo control clínico.
Interacciones
– AINE, incluyendo dosis bajas de ácido acetilsalicílico: el uso simultáneo de más de un AINE debe evitarse por el riesgo de que aparezcan efectos adversos sin que se vea incrementada la eficacia terapéutica.
– Alcohol: se puede ver potenciada la toxicidad.
– Alendrónico, ácido, bisfosfonatos: posible aumento del riesgo de esofagitis y úlcera gástrica. Descritos casos con naproxeno y alendronato.
– Antibacterianos quinolónicos: Existen informes aislados de convulsiones que pueden haber sido debidas al uso concomitante de quinolonas y antiinflamatorios no esteroides.
– Anticoagulantes orales, heparina: posible aumento del efecto anticoagulante, con riesgo de hemorragia. Se aconsejan controles periódicos de los índices de coagulación.
– Antidiabéticos: No se ha observado interacción. Sin embargo, existen casos aislados de efectos tanto hipoglucémicos como hiperglucémicos por diclofenaco que precisaron modificar la dosificación de los agentes hipoglucemiantes
– Antidiabéticos sulfonilureas (clorpropamida, glibenclamida, tolbutamida): Posible aumento de los efectos hipoglucemiantes, al reducir la excreción renal.
– Antihipertensivos (IECA, Beta-bloqueantes): posible reducción del efecto antihipertensivo.
– Ciclosporina: el efecto de los AINE sobre las prostaglandinas renales puede incrementar la nefrotoxicidad de la ciclosporina.
– Cimetina: aumenta aproximadamente en un 13 al 15% el área bajo la curva y la Cmax de piroxicam. Sin significación clínica.
– Clopidogrel: posible incremento del riesgo de hemorragia.
– Colestiramina: La colestiramina acelera la eliminación de piroxicam interrumpiendo la circulación enterohepática. Hay posible reducción de los niveles del antiinflamatorio, con el consiguiente riesgo de reducción o pérdida de la actividad terapéutica. Se trata de una interacción clínicamente significativa.
– Corticoides: posible aumento de la incidencia de molestias gástricas. Sin embargo, el uso simultáneo con glucocorticoides en el tratamiento de la artrosis puede proporcionar un beneficio terapéutico adicional y permite reducir la dosificación del glucocorticoide.
– Digitálicos (digoxina): posible de aumento de las concentraciones plasmáticas del digitálico (en neonatos). También hay riesgo de empeoramiento de la insuficiencia cardiaca y reducción de la función renal
– Diuréticos (tiazidas, diuréticos de alto techo): riesgo de reducción del efecto natriurético y diurético. Puede reducir la acción antihipertensiva de los diuréticos tiazídicos.
– Diuréticos ahorradores de potasio y antagonistas de la aldosterona: posible incremento del riesgo de hiperpotasemia. Se aconseja la monitorización frecuente de los niveles séricos de potasio.
– Hidralazina: Posible disminución del efecto hipotensor.
– Iloprost: posible incremento del riesgo de hemorragia.
– Litio, sales: posible incrementando de la toxicidad del litio debido a una reducción en su eliminación.
– Metrotexato: posible aumento de los niveles plasmáticos de metotrexato, con riesgo de toxicidad, a veces muy grave. La gravedad depende en gran medida de las dosis de metotrexato utilizadas. El riesgo de interacción se reduce con dosis bajas de metotrexato como las utilizadas en psoriasis y artritis reumatoide.
– Paracetamol: el uso simultáneo y prolongado de paracetamol y AINE puede ocasionar un aumento del riesgo de efectos renales adversos.
– Resinas de intercambio iónico (colestiramina, colestipol): hay estudios en los que se ha registrado reducción de la eficacia terapéutica del diclofenaco por reducción de la absorción.
– Verapamilo: se han observado reducciones del 25-30% de las concentraciones plasmáticas de verapamilo. Vigilar al paciente.
– Inhibidores, inductores y substratos de CYP3A4 y CYP2C9: No se han detectado interacciones farmacocinéticas relevantes respecto a la administración concominante de antiácidos, cimetidina y digoxina con meloxicam, pero pude darse un incremento de los niveles séricos de digoxina.
Embarazo
Los estudios en animales con diversos AINEs han registrado distocia, aumento de la pérdida post-implantación y retraso en el parto. No existen estudios adecuados y bien controlados en humanos. No parece que el uso ocasional, salvo poco antes del parto, produzca efectos adversos fetales. No obstante, con el uso crónico durante el 3º trimestre, podrían producir teóricamente cierre prematuro del ductus arterioso del feto, por inhibición de la síntesis de prostaglandinas. También pueden producir efecto antiagregante plaquetario, que podría complicar o prolongar la hemorragia materna y predisponer al recién nacido. Antes del parto, pueden reducir e incluso anular la contractilidad uterina, retrasando el parto y prolongando la gestación. El uso de estos fármacos, especialmente durante el tercer trimestre, sólo se acepta en caso de ausencia de alternativas terapéuticas más seguras.
Lactancia
Tras la administración de una sola dosis de tenoxicam, pasa una pequeñísima cantidad (0,2% aprox.) a la leche materna. Hasta ahora no se han notificado efectos adversos en el lactante. No obstante, se aconseja interrumpir la lactancia o suspender la medicación.
Niños
No se recomienda el empleo de AINEs en niños menores de 14 años.
Ancianos
Los ancianos parecen ser más susceptibles a los efectos adversos de los AINEs. El riesgo de padecer enfermedad ulcerosa grave esta incrementado en mayores de 65 años, y parece ser dosis-dependiente. Además pueden causar retención de líquidos, pudiendo producir complicaciones cardiovasculares y reducción de la eficacia de los tratamientos antihipertensivos. Se recomienda precaución en su uso e iniciar la terapia con dosis menores.
Reacciones adversas
– Gastrointestinales: (1-10%): [PIROSIS], [DISPEPSIA], [NAUSEAS], [GASTRITIS], [DOLOR ABDOMINAL] y [DIARREA] o [ESTREÑIMIENTO], [ESTOMATITIS], [FLATULENCIA]. De forma ocasional se han comunicado [HEMORRAGIA GASTROINTESTINAL], (incluyendo hematemesis y melena) y raramente [PERFORACION INTESTINAL] y [ULCERA PEPTICA].
La administración prolongada de las dosis máximas aconsejadas comporta un mayor riesgo de efectos adversos gastrointestinales. Se han comunicado casos raros de [PANCREATITIS] durante la administración de AINE.
– Hepatobiliares: La hepatotoxicidad inducida por AINE es rara y generalmente leve; habitualmente se manifiesta como [INCREMENTO DE LOS VALORES DE TRANSAMINASAS] asintomático y transitorio o [HIPERBILIRRUBINEMIA]. Se han comunicado raros casos de reacciones hepáticas graves, con [ICTERICIA] y casos de [HEPATITIS] fatal. Aunque este tipo de reacciones es raro, si las pruebas de función hepática anormales persistieran o empeoraran, si aparecieran signos y síntomas compatibles con enfermedad hepática o si se produjeran manifestaciones sistémicas (p. ej. eosinofilia, exantema, etc.), deberá interrumpirse la administración de piroxicam.
– Dermatológicas/hipersensibilidad: Se ha informado raramente de la aparición de reacciones de hipersensibilidad cutánea. Si bien, se han observado [ERUPCIONES EXANTEMATICAS] y [PRURITO] de forma ocasional. Se ha comunicado la aparición rara de [REACCIONES DE FOTOSENSIBILIDAD]. Como con otros antiinflamatorios no esteroideos, en raros casos puede aparecer [NECROLISIS EPIDERMICA TOXICA] (enfermedad de Lyell) y [SINDROME DE STEVENS-JOHNSON]. Raramente, reacciones vesículo-ampollosas.
Las reacciones de hipersensibilidad, como [ANAFILAXIA], [ESPASMO BRONQUIAL], [URTICARIA], [ANGIOEDEMA] y [VASCULITIS] se han comunicado raramente.
– Renales y urinarios: En casos excepcionales, los AINE pueden ser responsables de [INSUFICIENCIA RENAL AGUDA], [NEFRITIS INTERSTICIAL], [GLOMERULONEFRITIS], [NECROSIS MEDULAR RENAL] o [SINDROME NEFROTICO], [PROTEINURIA], [HIPERPOTASEMIA], [HIPONATREMIA], Se ha observado en pacientes susceptibles que toman altas dosis de AINE durante periodos prolongados de tiempo. Son pacientes de riesgo los que tienen insuficiencia cardiaca, renal o hepática, ascitis, hiperreninemia, hiperaldosteronemia, shock, sepsis, lupus eritematoso sistémico, deshidratación, los tratados con IECA o con diuréticos y los ancianos. Se han comunicado raramente [INCREMENTO DE LOS VALORES DE NITROGENO UREICO] e [INCREMENTO DE LOS VALORES DE CREATININA SERICA].
– Cardiovasculares: Raramente, [PALPITACIONES], [EDEMA], principalmente maleolares, empeoramiento de la [HIPERTENSION ARTERIAL] o aparición de nuevos casos durante tratamientos prolongados.
– Oftálmicas: Raramente se ha comunicado la aparición de edema palpebral, [VISION BORROSA] e irritaciones oculares.
– Sistema nervioso: Frecuentemente, [INSOMNIO], [CEFALEA]. Ocasionalmente, [MAREO], [SOMNOLENCIA]. Raramente, [DEPRESION], [NERVIOSISMO], [ALUCINACIONES], [ALTERACIONES DEL HUMOR], [PESADILLAS], [CONFUSION], [PARESTESIA], [VERTIGO].
– Otológicas: Raramente, [TINNITUS] y [TRASTORNOS DE LA AUDICION].
– Respiratorios: Raramente, [DISNEA].
Sobredosis
– Síntomas. Cabe esperar que se produzcan: cefaleas, agitación motora, calambres musculares, irritabilidad, ataxia, vértigos, convulsiones, sobre todo en el niño. Igualmente pueden aparecer dolores epigástricos, náuseas, vómitos, hematemesis, diarrea, úlcera gastroduodenal, trastornos de la función hepática y oliguria.
– Tratamiento: En general el tratamiento de la intoxicación aguda con antiinflamatorios no esteroideos consiste esencialmente en medidas de apoyo y sintomáticas. Se impedirá cuanto antes la absorción mediante lavado gástrico y tratamiento con carbón activado. Se aplicará un tratamiento de apoyo y sintomático frente a complicaciones, tales como hipotensión, insuficiencia renal, convulsiones, irritación gastrointestinal y depresión respiratoria. Los tratamientos específicos, como diuresis forzada, diálisis o hemoperfusión son probablemente poco útiles para eliminar los antiinflamatorios no esteroideos, debido a su elevada tasa de fijación proteica y a su extenso metabolismo.
Fecha de aprobación/revisión de la ficha
Abril de 2006.