Los casos de cáncer de pulmón entre mujeres se incrementan un 4% cada año
Los casos de cáncer de pulmón entre mujeres se incrementan un 4% cada año, a un ritmo "mucho más rápido" que en el caso de los hombres, que en los últimos años se ha estabilizado e incluso ha comenzado a descender, alerta la Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón (AEACaP).
"Es fundamental que se potencien los programas de prevención y diagnóstico especialmente dirigidos a la población femenina y que se tome conciencia del elevado peso asistencial que representarán estas pacientes".
Así lo ha puesto de manifiesto durante el acto de sensibilización en torno al cáncer de pulmón femenino.
La mortalidad entre las mujeres por esta enfermedad se ha duplicado en la última década hasta alcanzar las 3.000 fallecidas en el año 2009 y las previsiones.
Que en 2020 esta patología, directamente relacionada con el tabaquismo, puede desplazar al cáncer de mama como el más frecuente entre las mujeres.
"A nivel mundial, se dan más de 1.300.000 casos nuevos al año, en Europa 380.000 y en España 20.000, de los cuales 18.000 son hombres y 2.000 mujeres.
Y de hecho el 91% de las muertes por cáncer de pulmón en hombres se deben al tabaco y el 65% en las mujeres", afirma el doctor del servicio de Oncología Médica del Hospital General Universitario de Valencia, Eugenio Palomares.
Mientras que la incidencia en los últimos años en varones se está estabilizando, en mujeres ha incrementando debido al aumento del consumo de tabaco que se ha dado desde la década de los 90 en las mujeres españolas".
España, tercer país con más fumadoras
"Hasta el año 2000, España se situaba a la cola de Europa en cuanto al número de mujeres fumadoras, mientras que ahora ocupa el tercer puesto".
La elevada prevalencia debe ser una razón de peso, no sólo para potenciar planes de deshabituación tabáquica sin distinción de género.
Sino también para instar a las administraciones públicas a alcanzar un mayor compromiso político con la investigación oncológica con el fin de descubrir nuevos tratamientos que consigan curar la enfermedad o mejorar la supervivencia y calidad de vida de los pacientes.
Los futuros pasos deben enfocarse al desarrollo de la innovación encaminados a la definición de criterios clínicos, radiológicos y moleculares que permitan identificar a los individuos con más riesgo de presentar cáncer de pulmón.
El desarrollo de programas de cribado lo más eficiente posible y la investigación de nuevas moléculas que puedan desempeñar algún papel en esta lucha.