El médico realizará un examen físico y se analizarán los antecedentes médicos. Cuando un tumor está presente en la mama, en una mamografía se revelan todos los tumores. Una tomografía computarizada o una resonancia magnética muestran los tumores en el colon, pulmón u otros órganos. Cuando un tumor está localizado se realiza una biopsia para determinar si el tumor es benigno o maligno. Un tumor maligno se puede ver con una radiografía especializada  y determinar el estadio del cáncer.

Por suerte, el adenocarcinoma es fácil de detectar en una imagen, ya que decolora el órgano notablemente. Sin embargo, a menudo se requiere una biopsia para confirmar la ubicación y el tipo de cáncer, ya que el tratamiento varía mucho dependiendo de la colocación del adenocarcinoma. La mayoría de tratamientos progresan desde la extracción del cáncer con cirugía, hasta sesiones de quimioterapia para evitar que el cáncer vuelva a aparecer.