Amenorrea Causas y tipos
La amenorrea puede tener muchas causas. La amenorrea primaria puede ser el resultado de desequilibrios hormonales, trastornos psiquiátricos o de la alimentación, desnutrición, delgadez o gordura excesiva, pérdida rápida de peso, contenido de grasa corporal demasiado bajo y ejercicio físico excesivo.
El entrenamiento físico intenso antes de la pubertad puede retrasar la menarquia (la aparición de la menstruación). Cada año entrenando puede retrasar la menarquia hasta cinco meses. Algunos medicamentos como antidepresivos, tranquilizantes, esteroides y la heroína también pueden provocar amenorrea.
– Amenorrea primaria
Aunque la causa principal es un retraso en el inicio de la pubertad, puede presentarse por razones naturales (herencia o mala nutrición) o por un problema del sistema endocrino (un tumor en la pituitaria o hipotiroidismo). Una obstrucción de flujo o una inflamación del útero pueden ser indicaciones de un trastorno subyacente metabólico, endocrino, congénito o ginecológico.
Las causas típicas de la amenorrea primaria incluyen:
- Actividad física excesiva
- Pérdida drástica de peso ( anorexia o bulimia)
- Obesidad extrema
- Medicamentos (antidepresivos o tranquilizantes)
- Enfermedades crónicas
- Síndrome de Turner (uno de los problemas cromosómicos de nacimiento, sólo se produce en casos de amenorrea primaria)
- Ausencia de vagina o del útero
- Himen no perforado (falta de una abertura para la sangre menstrual)
– Amenorrea secundaria
Algunas de las causas de la amenorrea primaria, también pueden causar la amenorrea secundaria, en particular la actividad física vigorosa, fatiga, pérdida excesiva de peso, uso de antidepresivos o tranquilizantes.
Las adolescentes son especialmente propensas a períodos irregulares con fiebre, pérdida de peso, cambios en el entorno o aumento de la actividad física o deportiva. Cualquier cese del período por cuatro meses debe ser consultado.
Las causas más comunes de la amenorrea secundaria son:
- El embarazo
- Dejar de tomar pastillas anticonceptivas. Esta interrupción temporal por lo general sólo dura un mes o dos, aunque en algunos casos puede durar un año o más
- Problemas hormonales relacionados con el estrés, depresión, anorexia nerviosa o drogas
- Cualquier condición que afecta los ovarios, como un tumor
- Menopausia
- Histerectomía
- Síndrome de ovario poliquístico que se produce cuando los ovarios contienen muchos quistes con niveles anómalos de hormonas masculinas (andrógenos)