Generalmente, los carbuncos deben drenar antes de sanar. Esto suele ocurrir por su cuenta en menos de 2 semanas.

Colocar un paño húmedo y cálido en el carbunco ayuda en su drenaje y acelera su curación. Empape suavemente el área con un paño húmedo y caliente varias veces al día. Nunca se debe apretar o intentar perforarlo en casa, porque esto puede propagar la infección y empeorarla.

Si el carbunco dura por más de 2 semanas, si retorna frecuentemente, se encuentra en la columna vertebral o en la mitad de la cara o si ocurre junto con fiebre u otros síntomas,  necesita tratamiento. El tratamiento ayuda a reducir las complicaciones relacionadas con una infección.

El médico puede recetarle:

• Jabones antibacterianos
• Antibióticos de aplicación tópica en la piel o por vía oral

Las lesiones profundas o extensas deban ser drenadas por un médico.

La higiene adecuada es muy importante para prevenir la propagación de la infección. Siempre hay que lavarse muy bien las manos después de tocar un carbunco, no reutilizar paños ni compartir las toallas, ya que esto puede causar que se propague la infección. Las prendas de vestir, toallas, sábanas u otros artículos que han estado en contacto con las zonas infectadas deben lavarse en agua muy caliente (preferiblemente hirviendo). Cambiar los vendajes con frecuencia y desecharlos en una bolsa bien cerrada.