La mayoría de los carcinomas epidermoides se pueden extirpar completamente con una cirugía relativamente menor o de vez en cuando con una medicación tópica. El tipo de tratamiento del carcinoma epidermoide suele depender del tamaño, la ubicación y la agresividad del tumor y pueden incluir uno o más de los siguientes métodos:

• Congelación: Implica la eliminación de las células cancerosas mediante la congelación con nitrógeno líquido (criocirugía). Es eficaz para los pequeños carcinomas epidermoides, pero no se recomienda para tumores más grandes o los de la nariz, las orejas o los párpados
• Escisión simple: En este procedimiento, el médico corta el tejido canceroso y un margen circundante de piel sana. En algunos casos el médico puede recomendar una extirpación amplia (eliminación de la piel normal alrededor del tumor adicional). Para minimizar las cicatrices, sobre todo en la cara, consultar a un médico experto en reconstrucción de la piel
• Terapia con láser: Un intenso haz de luz vaporiza los crecimientos, por lo general con poco daño al tejido circundante y con un menor riesgo de sangrado, inflamación y cicatrización. Los láseres se utilizan a menudo para tratar carcinomas superficiales en los labios
• Cirugía de Mohs: Este procedimiento suele considerarse el tratamiento más eficaz para los carcinomas epidermoides, especialmente aquellos que miden más de 2cm, se han repetido o se encuentran en la cara, membranas mucosas o el área genital. Durante el procedimiento, el médico remueve capa por capa el tumor, examina cada capa bajo el microscopio hasta que no quedan células anómalas. Esto permite que todo el crecimiento sea extirpado sin eliminar una cantidad excesiva de la piel sana circundante. Debido a que requiere conocimientos especializados, la cirugía de Mohs sólo debe ser realizada por médicos especialmente entrenados en el procedimiento
• Radioterapia: Este procedimiento puede ser una opción para el tratamiento de cánceres grandes en los párpados, los labios y las orejas (las áreas que son difíciles de tratar quirúrgicamente) o para los tumores demasiado profundos para cortar
• Para cánceres muy superficiales pueden aplicarse cremas o lociones que contienen agentes anticancerígenos directamente sobre la piel. Algunos de estos medicamentos pueden causar inflamación y cicatrización grave, por lo que debe asegurarse de discutir las posibles complicaciones con el médico