Una serie de condiciones de salud, alergias, factores genéticos, estrés físico y mental e irritantes puede ocasionar dermatitis.

–        Dermatitis de contacto

Esta condición resulta del contacto directo con uno de los muchos agentes irritantes o alérgenos.

Entre los irritantes comunes se incluyen:

• Jabón de lavar
• Jabones o detergentes para la piel
• Productos de limpieza

Los alérgenos pueden ser:

• Caucho
• Metales como el níquel, bisutería/joyería
• Perfumes y fragancias
• Cosméticos
• Malas hierbas, como la hiedra venenosa
• Neomicina, un ingrediente común en las cremas antibióticas tópicas

Se necesita un mayor contacto durante más tiempo con un irritante para producir dermatitis que con un alérgeno. Una vez que una persona es sensible a un alérgeno, con sólo una breve exposición a una pequeña cantidad puede causar dermatitis. Una vez que se desarrolla la sensibilidad a un alérgeno, por lo general se tiene para toda la vida.

–        Neurodermatitis

Este tipo de dermatitis suele desarrollarse cuando algo ha creado una sensación de picor en un área específica de la piel. Esta irritación puede conducir a frotar o rascar la piel varias veces en esa zona. Los lugares comunes son los tobillos, muñecas, antebrazos o brazos y la parte posterior del cuello.

Las posibles causas incluyen:

• Piel seca
• Irritación crónica
• Eccema
• Psoriasis

–        Dermatitis seborreica

Esta condición causa un sarpullido con escalas rojo amarillentas y un poco “aceitosas”, por lo general en el cuero cabelludo. Es común en personas con piel o pelo grasos y puede aparecer y desaparecer dependiendo de la estación del año. Es probable que los factores hereditarios jueguen un papel importante en esta condición.

Las posibles causas son:

• El estrés físico
• Viajes
• Condiciones neurológicas, como la enfermedad de Parkinson

En bebés, este trastorno se conoce como costra láctea.

–        Dermatitis por estasis

La dermatitis por estasis puede ocurrir cuando el líquido se acumula en los tejidos debajo de la piel – típicamente en las piernas – debido a un retorno lento de la sangre de las venas de las piernas de regreso al corazón. El exceso de líquido interfiere con la capacidad de la sangre para nutrir la piel y ejerce una presión adicional sobre la piel.

Las posibles causas incluyen:

• Venas varicosas
• Otras enfermedades crónicas o infecciones recurrentes que afectan a la circulación en las piernas

–        Dermatitis atópica

Esta condición ocurre a menudo con las alergias y con frecuencia se da en familias en que los miembros tienen asma o fiebre del heno. Por lo general comienza en la infancia y puede variar en gravedad durante la infancia y la adolescencia. Tiende a convertirse en un problema menor en la edad adulta, a menos que la persona esté expuesta a los alérgenos o irritantes en el lugar de trabajo.

Las posibles causas incluyen una combinación de:

• Piel seca, irritable
• Un fallo en el sistema inmunológico del cuerpo
• Tendencia genética a enfermedades alérgicas como el asma o fiebre del heno

El estrés puede agravar la dermatitis atópica, pero no la causa.

–        Dermatitis perioral

Este tipo de dermatitis puede ser una forma de la enfermedad de la piel llamada rosácea, del acné adulto o dermatitis seborreica con la participación de la piel alrededor de la boca o la nariz.

Las posibles causas incluyen:

• Maquillaje
• Cremas hidratantes
• Corticoides tópicos
• Productos dentales que contengan flúor