La desnutrición es una condición que se desarrolla cuando el cuerpo no recibe la cantidad adecuada de proteína, energía (calorías), vitaminas y otros nutrientes que necesita para mantener los tejidos sanos y el funcionamiento normal de los órganos.

Los malos hábitos alimentarios o la falta alimentos puede conducir a la desnutrición. La desnutrición es la consecuencia de consumir poca energía y otros nutrientes esenciales o el uso o la excreción de ellos más rápidamente de lo que pueden ser reemplazados. Este estado de desnutrición se caracteriza a menudo por infecciones y enfermedades. La desnutrición  intensifica el efecto de cada enfermedad. La malnutrición grave es más frecuente en países subdesarrollados o en vías de desarrollo. La deficiencia de un nutriente se produce con menos frecuencia que la deficiencia de varios nutrientes. Un niño que sufre de malnutrición suele ser deficiente en una variedad de nutrientes.

La causa principal de muerte en niños en países subdesarrollados y en vías de desarrollo es la malnutrición proteico-energética, resultado de una ingesta inadecuada de proteínas y energía. Los niños que ya están desnutridos pueden sufrir de malnutrición proteico-energética con el rápido crecimiento, infección o una enfermedad que aumenta la necesidad de nutrientes esenciales y proteínas.