Obesidad mórbida Tratamiento
Las complicaciones y la comorbilidad causadas por la obesidad mórbida, son la principal razón por la cual estos pacientes deben encarar un tratamiento adecuado.
Una reducción del 10 por ciento del peso corporal reduce los riesgos asociados a esta enfermedad.
Actualmente se recomienda que el objetivo del tratamiento se centre en un descenso de peso de aquel 10 por ciento. Esto, además, ayuda al mantenimiento del peso perdido, en el largo plazo.
La elección del tratamiento se debe basar en las características individuales de cada paciente, y los distintos profesionales (médicos, nutricionistas, preparadores físicos, psicólogos y cirujanos) pueden orientar al enfermo a elegir el tratamiento más adecuado.
Existen distintas estrategias que pueden aplicarse en la obesidad mórbida, tales como el tratamiento dietético, la actividad física, la terapia conductual.
Tratamientos a base de drogas y la cirugía bariátrica. La elección se centra en uno de ellos o la combinación de varios.
Existen dos tipos de cirugía, una restrictiva, que se lleva a cabo en estómago y produce una limitación de la ingesta; y otra, una técnica mixta que actúa sobre el estómago y el intestino.
Esta última presenta mejores resultados a largo plazo, pero mayores riesgos de mala absorción y complicaciones.
Las enfermedades más frecuentemente asociadas con la obesidad mórbida son la diabetes tipo II, la enfermedad coronaria, las dislipidemias y la hipertensión arterial.
La enfermedad coronaria es la causa más frecuente de muerte en estos de pacientes. Las dislipidemias y la hipertensión arterial, factores de riesgo de la enfermedad coronaria, se presentan en obesos con una frecuencia del 40 por ciento.
Otras afecciones destacables son la osteoartrosis grave en articulaciones de carga, y algunos trastornos del tubo digestivo como el reflujo esofágico.
La hernia de hiato, la colelitiasis y la esteatosis hepática. Específicamente en en mujeres, también se observan problemas relacionados con el aparato reproductor, tales como la poliquistosis ovárica, la infertilidad y la mortalidad perinatal.