TOC
TOC: Trastorno obsesivo compulsivo
Este trastorno se caracteriza por la presencia de obsesiones y compulsiones, excesivas e irracionales, que provocan un malestar significativamente.
Las personas que los sufren pueden experimentar ataques de TOC en momentos de estrés extremo o preocupación, o a veces los sufren constantemente.
Considerado hasta hace algunos años como una enfermedad psiquiátrica rara que no respondía al tratamiento, hoy reconocido como un problema común que afecta al 2-3% de la población, a más de 100 millones de personas en todo el mundo.
Es un trastorno en los que el paciente, es consciente de que está enfermo, hay pacientes que experimentan un gran deterioro a nivel físico, laboral o familiar por la intensidad de los síntomas.
El ejemplo clásico, por ser uno de los casos más frecuentes, es la obsesión por la contaminación, que lleva al paciente a la compulsión de lavarse una y otra vez las manos, (a veces hasta producirse lesiones en la piel) o a evitar el objeto supuestamente contaminado.
La mayoría de las personas con este trastorno tienen obsesiones y compulsiones, aunque se pueden presentar también casos sólo con unas u otras, de forma aislada.
Afortunadamente, en los últimos años se han producido avances muy importantes en el tratamiento, por lo que la gran mayoría de los pacientes pueden llevar una vida normal.
Cómo se produce el TOC
Como ocurre con la mayoría de las enfermedades mentales, no hay un solo factor responsable de su aparición, implicándose en ella factores genéticos, orgánicos (físicos) y psicológicos. Un 35% de los pacientes tienen padres, madres o hermanos afectados por la misma enfermedad.
Suelen tener obsesiones y compulsiones diferentes a los de sus antecesores, por lo que se piensa que en algunos pacientes sí se hereda la capacidad de responder con obsesiones a las experiencias de la vida.
En los factores orgánicos, se han descubierto trastornos en el funcionamiento de algunos neurotransmisores (sustancias químicas cerebrales encargadas de transmitir los impulsos nerviosos).
Algunas zonas concretas del cerebro; estos hallazgos pueden explicar la buena respuesta que tiene la enfermedad a los fármacos que actúan modificando esas sustancias cerebrales.
Síntomas del TOC
Los síntomas del TOC varían desde pensamientos extraños o perturbantes hasta rituales extremos. Como:
– Los gérmenes o la limpieza podrían provocarle lavarse constantemente.
– Las dudas sobre el cumplimiento de una acción le podrían torturar.
– Los pensamientos violentos podrían embrujarle.
– Puede que cuente obsesivamente o se obsesione con ciertas canciones o palabras.
– Puede que tenga que arreglar y desarreglar objetos simétricamente o en un cierto orden.
– Puede que tenga pensamientos sexuales que usualmente le serían extraños.
– Puede que se ponga obsesivamente religioso o que desarrolle sistemas de creencias exagerados.
Las personas que sufren del TOC saben que lo que hacen esta equivocado y es obsesivo pero no pueden detenerse. Pero hay algunas personas que las sufren no reconocen nada de malo en sus acciones y depende de otras personas informarles que su comportamiento es inapropiado.
Compulsiones comunes
• Limpiar y arreglar, como lavarse las manos, tomar baños o cepillarse los dientes una y otra vez.
• Revisar cajones, puertas y aparatos eléctricos para asegurarse de que están cerrados, con seguro o apagados.
• Repetir, tal y como salir y entrar por una puerta, levantarse y sentarse de un asiento o tocar ciertos objetos varias veces.
• Ordenar y disponer cosas de cierto modo.
• Contar una y otra vez hasta cierto número.
• Guardar periódicos, correspondencia o empaques que ya no son necesarios.
• Buscar seguridad y aprobación continua.
Las personas que tienen TOC con frecuencia tienen otros tipos de ansiedad tales como fobias (miedo a las arañas o a volar) o ataques de pánico.
Tratamientos para el TOC
El TOC es un síntoma de un trastorno de ansiedad. La amígdala (un pequeño órgano situado dentro del cerebro) provoca la ansiedad inapropiada, que alimenta las obsesiones y compulsiones.
Existen varios medicamentos disponibles para tratar el TOC. Estos medicamentos incluyen:
– Clomipramina.
– Fluoxetina.
– Sertralina.
– Paroxetina.
– Fluvoxamina.
Estos medicamentos pueden causar efectos secundarios, como resequedad en la boca, náusea y somnolencia. Algunas veces también afectan el funcionamiento sexual de una persona.
Puede tomar varias semanas antes de que usted vea mejoría con respecto a su comportamiento. Los tratamientos que consisten en medicamentos sólo pueden, enmascarar los síntomas del TOC.
La ansiedad subyacente que provoca el TOC no se puede curar con drogas, es una condición de comportamiento, aprendida por la amígdala.
La terapia conductual también puede utilizarse para tratar el TOC bajo el cuidado de un terapeuta entrenado. Lla gente se expone a situaciones que causan o desencadenan sus obsesiones y ansiedad. Se les incentiva a no realizar los rituales que usualmente les ayudan a controlar sus nervios.
Por ejemplo, una persona que está obsesionada con gérmenes se motiva a usar un baño público sin lavarse las manos más de una vez.
Para usar este método una persona que tiene TOC tiene que ser capaz de tolerar los niveles altos de ansiedad que esto puede generar.