Una dieta rica en antioxidantes retrasa el Alzheimer
Investigadores de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) han demostrado que una dieta rica en sustancias polifenoles y ácidos grasos poliinsaturados, conocidas por sus propiedades antioxidantes, aumenta la producción de las células madre en el cerebro, el posterior nacimiento de nuevas neuronas y podría favorecer el retraso de la aparición y evolución del Alzheimer, que se caracteriza por el deterior de estas células.
Los polifenoles se hallan en alimentos como el té, la cerveza, la uva, el vino, el aceite de oliva, el cacao, las nueces y otras frutas y vegetales. Los ácidos grasos poliinsaturados se encuentran en el pescado azul y vegetales como el maíz, la soja, el girasol y la calabaza.
El estudio realizado mostró más proliferación celular en el cerebro de los ratones alimentados –durante 40 días, equivalente a 5 años en un humano– con esta dieta que en el de los alimentados con una dieta estándar. En ambos casos se estudiaban las dos regiones donde nacen las neuronas –el bulbo olfativo y el hipocampo–, que resultan especialmente dañadas con la enfermedad de Alzheimer.
Los resultados, publicados en la revista ‘Journal of Alzheimer Disease’ y dirigido por Mercedes Unzeta, refuerzan la hipótesis de que una dieta basada en alimentos ricos en estas sustancias antioxidantes podría retrasar la aparición de la enfermedad o retardar su evolución.
Además de Unzeta, profesora del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular de la UAB, han participado en el trabajo investigadores de este Departamento y de los Departamentos de Biología Celular, Fisiología e Inmunología y de Psiquiatría y Medicina Legal, todos ellos adscritos al Instituto de Neurociencias de la Universidad, así como de la empresa La Morella Nuts y de la Fundación ACE del Instituto Catalán de Neurociencias Aplicadas.
Para el trabajo, se ha elaborado una pasta formada por una mezcla de productos naturales: frutos secos, coco, aceites vegetales ricos en ácidos grasos poliinsaturados y harinas ricas en fibras solubles. Ha sido elaborada y patentada por la empresa La Morella Nuts.
Estudios previos habían validado su funcionalidad en la regulación del colesterol y la hipertensión, dos factores de riesgo comunes en las enfermedades cardiovasculares y en la enfermedad de Alzheimer.
Durante el desarrollo del cerebro, las células madres generan las diferentes células neuronales (neuronas, astrocitos, oligodendrocitos) que formarán el cerebro adulto.
Hasta finales de los años 60 se pensaba que la dotación neuronal de los mamíferos adultos disminuía a medida que se envejecía sin que hubiera posibilidad de renovación. Actualmente se sabe que sí que existe formación de nuevas neuronas, aunque esta capacidad queda restringida a dos regiones del cerebro: el bulbo olfativo y el hipocampo (área implicada en la memoria y los procesos cognitivos).
También se sabe que a pesar de que el ritmo de proliferación celular se reduce con la edad y las enfermedades neurodegenerativas, el ejercicio físico y una situación de bienestar personal favorecen este proceso.
La investigación realizada forma parte de un proyecto CENIT, concedido a la empresa La Morella Nuts, el año 1996, en el marco de un programa Ingenio 2010 y dirigido a establecer metodologías para el diseño, evaluación y validación de alimentos funcionales en la prevención de enfermedades cardiovasculares y Alzheimer.