El balón intragástrico combinado con apoyo psicológico y nutricional es una buena alternativa a la cirugía

El balón intragástrico combinado con apoyo psicológico y nutricional es una buena alternativa a la cirugía para los casos de obesidad grave. Aseguran los expertos de Clínica Londres, basándose en los resultados de un estudio prospectivo realizado en más de 60 pacientes.

Los datos preliminares han demostrado que este tratamiento no sólo es efectivo en los pacientes en los que tradicionalmente estaba indicado (personas con obesidad leve o moderada), sino que también es muy eficaz para que personas con obesidad grave (mórbida) pierdan peso.

Se trata de un programa multidisciplinar de educación alimentaria de dos años de duración que combina el balón intragástrico (que llevará el paciente los primeros seis meses de tratamiento) y el apoyo médico, psicológico y nutricional.

"Hasta ahora", explica el responsable de la Unidad de Obesidad de Clínica Londres, Eduardo Morejón, "los pacientes con un Índice de Masa Corporal (IMC) superior a 40, o lo que es lo mismo, con una obesidad mórbida, tenían como principal opción la cirugía bariátrica".

Este tipo de intervenciones (banda gástrica o ‘by-pass’ gástrico) son eficaces en muchos de estos pacientes, pero también conllevan serios riesgos para la salud con un porcentaje de mortalidad significativo, cosa que no ocurre con el balón intragástrico.

En palabras del responsable de Psicología en la Unidad de Obesidad y Nutrición del centro, Ricard Sorio, aunque por sí solo el balón intragástrico no adelgaza.

Si que logra reducir la sensación de hambre y facilitar una pérdida de peso rápida inicial junto con el control dietético, lo que facilita que se adopten hábitos nutricionales correctos gracias al apoyo psicológico individual y en talleres de grupo.

Pérdida de peso mantenida

Varios estudios llevados a cabo con más de 5.000 pacientes confirman, que las personas que han realizado un programa de adelgazamiento con balón intragástrico, no sólo consiguen perder más peso que aquellos que sólo realizan dieta, sino que esta pérdida se mantiene por más tiempo.

El promedio de kilos perdidos y no recuperados, tras 2 años de tratamiento, es de 20 kilos en los pacientes que han usado balón, frente a los 3 kilos adelgazados en los que sólo han realizado dieta.

El 85% mejoran o curan sus niveles de glucemia, el 90% dejan de ser hipertensos y el 80% elimina sus problemas respiratorios como la apnea del sueño.