El cáncer es la primera causa de muerte entre los hombres en España, y la segunda entre las mujeres. Pero, "de una manera cautelosa, hay buenas noticias", señala la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM).

Los datos sobre esta enfermedad apuntan que la mortalidad entre hombres disminuye un 1,3% anual, y entre mujeres un 1%, según dijo ayer Emilio Alba, presidente de la sociedad.

En total, los tumores representan unas 100.000 muertes anuales. La cifra es coherente con lo que pasa en otros países, como EE UU, donde el descenso es aproximadamente un 1,6% anual.

La causa es clara: caen las defunciones por cáncer de pulmón (el más frecuente en hombres), y se han estabilizado los de mama en mujeres (aunque los de pulmón aumentan por culpa del tabaco).

Esta distribución de los tumores tiene un efecto claro en la mortalidad: el 45% de los hombres a los que se les diagnostica se cura; en cambio, entre las mujeres esta proporción sube al 55%.

Y ello se debe a que el cáncer de pulmón tiene un diagnóstico muy malo (sobrevive menos del 30%), mientras que las curaciones del cáncer de mama están por encima del 70%.

Registro incipiente

La SEOM se basa en un estudio del Instituto de Salud Carlos III; y en que, por primera vez, en España hay algo parecido a un registro de tumores, aunque todavía en fase inicial.

Este cómputo solo recoge datos de aproximadamente un 25% de los casos, pero permite extrapolar la situación a toda España.

Así, se ve que el número de nuevos diagnósticos cada año se mantiene más o menos estable alrededor de los 180.000 o 200.000 desde 2000, apuntó Alba.

Estas buenas noticias tienen una lectura más negativa en los datos que da la Fundación ECO (Excelencia y Calidad de la Oncología), que apunta que hay un rejuvenecimiento en las edades de los enfermos.

La SEOM y la Fundación ECO han ofrecido sus impresiones en avance a Día Mundial contra el Cáncer, que es mañana.

Pero la SEOM este año no quiere lanzar un mensaje solo sanitario. Alba, que compareció con representantes de asociaciones de pacientes, hizo hincapié en el lema del día.

No es una enfermedad larga y dolorosa, es cáncer, como una manera de pedir que no estigmatice a la enfermedad de la manera más sutil que existe: ignorándola en el lenguaje.

De la misma manera, piden que no se utilice la palabra cáncer para defirnir todo lo malo – "la droga es el cáncer de la sociedad", fue su ejemplo de un mal uso-, por su impacto en el ánimo de los afectados.

"Aunque la Academia lo admita, vamos a pedirle que retiren esta acepción".