Edema pulmonar Tratamiento
El edema pulmonar requiere un tratamiento inmediato de urgencia. El tratamiento incluye: colocar al paciente en posición sentada, oxígeno, respiración mecánica o asistida (en algunos casos) y tratamiento farmacológico. El objetivo del tratamiento es reducir la cantidad de líquido en los pulmones, mejorar el intercambio de gases y la función del corazón y, cuando sea posible, corregir la enfermedad subyacente.
Se sienta al paciente para ayudarle a respirar mejor y se le administran altas concentraciones de oxígeno. En casos de dificultad respiratoria grave se utiliza un ventilador mecánico y se inserta un tubo por la garganta para mejorar el suministro de oxígeno. La ventilación no invasiva con presión es un nuevo tratamiento para el edema pulmonar en la que el paciente respira contra un flujo continuo de presión de aire positiva, a través de una mascarilla nasal o facial. Este tratamiento reduce el esfuerzo necesario para respirar, mejora el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono y aumenta el gasto cardíaco.